23 sept 2016

Rojo Carmín

Título: Rojo Carmín.

Banda:
Tokio Hotel / Lana Del Rey.

Parejas:
Bill-Original femenino.

Categoría:
Hetero.

Completo:
Sí.

Género:
Angustia.Drama. Romance. Song Fic.

Advertencias:
Contenido adulto.

Clasificación:
Fiction Rated M (16+)






Resumen:

One night, one scream, one echo. Silence louder than before...~ 

Bill Kaulitz, el famoso vocalista de Tokio Hotel se ve en crisis emocional. Su vida dá un giro inesperado tras conocer a una mujer de labios color rojo carmín. Aquella que cambió su mundo para siempre. Sin planearlo, se enamora ciegamente de ella. En cuanto se da cuenta que lo está, ya es demasiado tarde.. Ella ya no está a su lado. La banda se ve afectada con la situación que afronta Bill cotidianamente, en especial Tom Kaulitz, su gemelo.





– Está muy buena la comida que haz preparado, Georg! –

Le hablo mirándolo con una sonrisa. Él siempre era el único que le encantaba estar en la cocina.

-Sabes, la hice con mucho amor, Bill –

Georg me guiña y sé que habla en tono burlón.

-Bah! Ustedes pasan de cursis-

Habla Tom, noto que se ríe de nosotros.

– A tí también te amo, Tom! –

Habló Georg mirando a Tom y ambos nos reímos.

Ambos siguen riendo a carcajadas por simples frases que no oigo por estar en lo mío. Gustav me mira y se ríe pero no dice nada, así es como siempre se comporta él.

Mi hermano, a él le debo las gracias, ya que sin él no estaría como lo estoy ahora. Tuvimos que retrasar el álbum más de una fan me habrá odiado por la gran decisión pero debía prestarme más atención a mí mismo.

De repente cuando quería beber noto una pelotita hecha de papel de servilleta, estos bestias siempre hacen algo que no me cae en gracia.

-¿Quién fue?-

Los interrumpo, ya que estaban bromeando entre sí.

-No lo sé, Bill, ¿ cayó del cielo?-

Habló Georg, pero se cruzó de brazos observando a Tom, aunque no dejaban de reír con cada palabra.

-Vamos Georg, fuiste tú, no mientas-

Dijo Tom. Miro a ambos, y los dos se miran entre sí y ríen mirándome.

– Tom, dile la verdad a tu hermanito pequeño-

Habló Georg, me fastidiaba que me trataran de pequeño.

-La verdad que fue gustav!-

Habló Tom y los tres volteamos a ver a Gustav.

-Gustav pareciera de que no rompe ningún plato, pero es todo lo contrario, Bill-

Habló Tom y no me lo creía. En verdad Gustav, era el más decente de los tres.

-Quien sea que fuera me ha arruinado mi coca-cola, joder.. –

Hablé y los vi a ambos. Suspire cansado y con mala gana me levanté de la mesa agarrando el vaso.

– Lo siento Bill, Tom a veces se pone pesado y me avienta cosas a la cara, nuestro amor es muy violento-

Habló Georg, riéndose después.

Yo no puedo evitar reír por las tonterías que dicen.

Suspiro y llevo mi plato a la cocina quito la bolita de papel que tenía dentro del vaso y me pongo a pensar detenidamente. No estoy preparado para las giras y debe posponerse el nuevo album, razón por la cual me apena bastante por el hecho de que rompí esa promesa. Pero no doy más con todo lo que me ha pasado en la vida en éstos últimos meses.

Mi hermano me obligó a tomar descanso en Las Vegas, ya que mi vida se tornaba cada vez más gris, hasta me daban pocas ganas de hacer algo.

Aún siento ése dolor en mi pecho, las razones fueron múltiples pero sigo vivo , sigo fuerte que es lo que me mantiene en pie.

Enjuago el vaso y me dirijo hacia la mesa nuevamente. Natalie me frena el paso y me pregunta cosas que no entiendo, me saca una fotografía y me lleva de la mano hasta un cómodo sofá. Me mira fijamente, me pregunta cómo me siento, cómo me fue en el viaje a Las Vegas. Le respondo que bien, que aún me siento algo confundido, y que tuvimos que posponer la fecha del álbum. Rápidamente ella me conoce tan bien que me rodea con sus brazos, me da consuelo.

-BIIILL!! –

Escucho a Tom, me sorprende y me mira fijo pero noto que está algo triste también.

– ¿Que?-

Le respondo hablando bajo y lo observo detenidamente.

-Ria no vendrá hoy, tiene mucho trabajo.-

Habla claro, rascándose la nuca.

– Me parece fantástico, podremos pasar la noche viendo películas..o..-

Le propongo y Tom me sonríe y nota que estoy sonriendo también.

– Los dejo solos, chicos! –

Natalie me saludó, y saludó a Tom y le dijo algo que no entendí.

-Nos vemos nat! –

Le digo, ella se va saludando con su mano.

-Adios Nat!

Dice Tom, pero notaba que algo le sucedía.

-Ven aquí pequeño..-

Me dijo, y se acercó hasta mí dándome una amigable palmada en la espalda.

-No me digas así, sólo soy diez minutos menor, Diez!-

Le recrimino, él me abraza y lo abrazo rápidamente y mi estomago se revuelve, aquellas lágrimas vuelven a salir pero con menor fuerza. Siento la mano de Tom acariciando mi espalda en vaivén.

– Ya pasará, no te preocupes. –

oigo a Tom, su voz calmada me tranquiliza un poco más, mi piel se eriza y siento un frío en todo mi cuerpo que me hace tiritar.

-No haz comido nada, Bill, me preocupas.-Me regaña. Murmura preocupado y noto que me aprieta entre sus brazos.

-L-lo siento .. –

Le murmuro de regreso con mi voz entre cortada.

-Bill..

Me dice suave.

– Qué?-

Respondo bajo.

-Lo siento, hermano por arruinar tu bebida –

Suelta una risa, pero se separa del abrazo y me mira.

Lo miro y le doy un pequeño empujón. Imbécil!

Digo riendo y él me mira.

Me doy cuenta de su mirada profunda, sé lo que piensa, lo que siente, sé que parte de lo que me ha ocurrido a mí, le ha afectado de sobremanera aunque trate de disimular.

-Bill, me acabé lo que tenías en el plato.-

Nos sorprende Georg.

-Georg.. Vete que estamos hablando cosas de gemelos!

Habla Tom.

– Ehhm ok, no interrumpo

Georg se da la vuelta y camina hacia no se dónde.

– Tom, joder, la verdad que quiero dormir-

Hablo bajo, esperando que comprenda mi situación.

-Ve, ¿quieres que te acompañe?-

Me dice, noto que está preocupado.

-Es..tarde, y..Ria vendrá y..-

Suspiro y hablo desviando su mirada.

– y, nada. –

Me dice y enciendo un cigarro. Me voy hacia mi habitación que estaba al lado del pasillo del cuarto donde teníamos el pequeño estudio. Camine con pereza , hacia la cama pero noto que Tom estaba detrás de mí.

Noto que se recuesta y mira hacia el techo, su mirada perdida..me llama la atención.

-Tom, así no podré recostarme, quítate!-

Le hablo y tiro de las sabanas tratando de que se levante.

Él me mira fijo, noto sus lágrimas en los ojos. No sé que le sucede pero rápidamente se levanta, me da las buenas noches y palmea mi hombro.


***

De repente noto que todo está en silencio, así que al ver que Tom se marchaba me desvisto en mi habitación.

Me quedo en boxers, me coloco una playera y después me siento en la cama para meterme dentro en ella.

Trato de relajarme , relajar mi cuerpo en la cómoda cama, pero siento que tanto mi cabeza como mi corazón funcionan de noche y no paro de pensar en cosas estúpidas.

Me doy cuenta que por más vueltas que dé en la cama es inútil, que no puedo conciliar el sueño. Cada noche era frecuente que me sucederan éste tipo de cosas.

Siento como si el corazón no tuviera sueño. Aún siento ése gran vacío que ha dejado en mi vida. Me hubiera gustado que me quisiera otra vez, como si nunca nos hubiéramos hecho daño.

Cada noche siento que los recuerdos me atacan fuertemente, me hacen sentir que no valgo. Me hacen caer.

Suspiro y noto que alguien se acerca a mi habitación abriendo la puerta muy despacio. Noto su mirada, pero después se apoya en el umbral de la puerta, noto que me observa algunos minutos sin decirme absolutamente nada.

Me siento en la cama, apoyo la espalda en el respaldar, me siento algo resignado. Suspiro hondo mirando hacia la pared sintiéndome desganado.

Volteo la mirada hacia la puerta y allí estaba él. Se me acerca, se sienta a mi lado, noto sus brazos rodearme. Cierro los ojos y me hundo entre mis pensamientos, asi como tambien aquellos sentimientos confusos. Se me salen algunas lágrimas..porque no puedo evitarlo.

Suelto un suspiro pero él no dice nada, se mantiene en silencio.

Mis ojos se humedecen, en cada respiro que doy, siento como si mi corazón se encogiera un poco más. Siento como si muriese de a poco..siento como si me hundiese más y más en un agujero sin salida.

Siento que con cada aliento que tomo, pierdo la fe, la intuición y me ahogo en estúpidas lágrimas.

Que lucho contra la lujuria, contra aquello que me hace daño y me siento débil. Las imágenes del pasado me atormentan y siento que caigo. Pero con el tiempo todos nos escondemos en una máscara de heroes.. Ocultamos lo que nos pasa, fingimos una sonrisa. Aquellas

cicatrices en nuestras caras, muestran los restos de aquel amor. A veces no se sabe lo que es la vida, hasta que mueres por ella.

Aunque siempre en esta vida

tenemos lo que nos merecemos.

Me derrumbo..

El dolor vuelve chocando contra mí. Aquél sentimiento me sofoca.

Me acuerdo de nosotros , me acuerdo cuando la conocí por primera vez, pero el sentimiento está mal..por más vueltas que le dé al asunto.

Tom se separa y me mira con extrañeza, sus ojos castaños claros me miran de manera curiosa. Me toma de la mano y acaricia éstas entre las suyas. Siento aquella paz tan buscada. Me examina. Sé que siente lo que yo estoy sintiendo.

Suspiro hondo pero él se separa, se recuesta rápidamente en mi cama. Me toma del brazo y me jala mas hacia él. No lo pienso dos veces, y me recuesto a su lado, él me cubre con sus brazos.

Me siento completo, siento que nada ni nadie puede hacerme daño entre sus brazos.

-Estás seguro que Ria no vendrá.?- Le cuestiono dudoso entre un susurro, y noto sus manos acariciarme el cabello lentamente.

– No vendrá, no te preocupes. –

Habla murmurando confiado y me da un cálido beso sobre la frente.

Suspiro bajo, me siento realmente bien a su lado.

Lo abrazo pero me acomodo entre los mismos buscando más comodidad. Cierro los ojos y siento como cada vez me quedo dormido.

Al día siguiente, me despierto.

Se podían oír los ruidos en la sala o no se dónde. Los chicos estaban levantados y yo fui el último en despertar. Me dirijo para asearme y veo a Ria con Tom, ellos hablan bajo, parece que están discutiendo sobre cosas que no entiendo.

Sin dudarlo entro al baño, me desvisto, me meto a la ducha dejando que el agua corra por todo mi cuerpo. Me pongo a pensar hasta donde he llegado, pero otra vez pienso en aquél pasado.

En cuanto termino de ducharme, me visto, me arreglo más de la cuenta. Salgo y saludo a todos, mientras los miro.

Gustav y Georg hablaban con Nat, pero al aparecer éstos se dispersan al verme

-BUENOS DIAAS! .-

Hablo alto carismático al llegar hasta la mesa, Georg se levanta y busca una taza. Después de cortos segundos, veo que Gustav se me acerca con una taza de café. Me la da, le agradezco.

-Aqui tienes, buen dia- . – me habla Gustav.

pero luego oigo que los chicos vienen hacia la mesa.

-Buenos días Queen!-

Me habla Georg, y yo le saludo.

-Buenos días Billy-.-Nat me saluda me sonríe y se sienta a mi lado.

Suspiro y Tom me sonríe de aquella punta, aún está hablando con Ría.. Y veo que me saluda con la mano.

Suspiro y bebo de a poco mi café, desbloqueo mi móvil y veo las noticias en él.

La verdad que todo se mantiene tranquilo cuando viene Ría. No sé porque, los Gs se hablan y bromean entre sí. Noto que se empujan y ríen, se divierten mientras yo me mantengo callado.

Natalie me medio abraza de costado sin razón me besa la mejilla.

Me pregunta cómo estoy, le digo que bien. Después habla sobre algo que no comprendo por estar viendo a Tom.

-Disculpame, ¿que haz dicho Nat?-

Pregunto concentrandome en sus palabras pero la miro a los ojos. No podía concentrarme lo suficiente.

-¿Llevaras a Pumbi en el día de hoy?-

Me pregunta y me mira muy relajada

Sé que ella también tiene cosas para hacer y siento que se preocupa demasiado.

-No, es mejor que se quede aquí, y cuidarás de él?-

Le pregunto suspirando, sé todo lo que pasará si pumba me acompaña.

Sé que nos acosaran los paparazzis, en cuanto nos vean se volverán locos.

-Por supuesto, Billy!-

Me lo dice con ése ánimo que envidio.

Miro a mi mascota, y lo alzo en brazos. Pumba era como mi hijo y siempre necesitaba cuidados especiales.

El dia se mantuvo en orden.

La razón por la que me he convertido en alguien tan serio, frío y con poco sentido del humor se debe a lo que me sucedió muchos meses antes a ésta realidad.

Todo comenzó desde el dia que la conocí.

                                     ***

«Una vez, hace varios meses atrás.»

En fin, ya se nos estaba acabando aquel descanso que habíamos soñado tantas veces. Aquellas vacaciones que tuvimos nos hicieron recuperar fuerzas y ganas para volver al estudio con nueva música y sentirnos más inspirados que antes.

Era tiempo de comenzar una nueva vida en Los Ángeles. Volver a las grabaciones, a los conciertos, volver a nuestra vida como músicos. Dar lo mejor de nosotros a todos aquellos fans que siempre estuvieron con nosotros desde nuestros comienzos.

El tema de volver a cantar me hacían sentir muchos nervios, ansiedad y sentimientos extraños porque para mí, sabiendo que iba a regresar con la banda de Tokio Hotel, a dar lo mejor me ponía tenso y feliz al mismo tiempo.

Pero todo no resultó como planeaba o eso suponía.

Todo ocurrió cuando en el avión de regreso a Los Ángeles, fui sorprendido por una mujer de casi mi edad aunque no se veía muy mayor. Ésta me tomó por sorpresa cuando justamente traía a pumba con la correa mientras caminaba con Tom.

El vuelo resultó de maravilla, pero en algún momento noté que mi mascota se quedó atrás por lo que tuve que voltear a ver que le sucedía. Aquella mujer la que me había cruzado anteriormente, me saludó amablemente, pero Pumbi se llevó todas las miradas de los demás. Pumba acaparo la atención de ella quién se inclinó y acarició parte de su cabeza.

Tom y yo nos miramos unos cortos segundos, era frecuente que mi mascota les agradara a los demás. Mientras caminábamos los tres, ella se acercó. Quise imaginar que no lo hacía porque yo era famoso.

Nos hablamos muy poco entablando una simple conversación sobre Pumba, me dijo que le encantaba ese tipo de cachorros. Me di cuenta que ambos teníamos un buen gusto por las mascotas, eso me agradaba pero yo la veía como cualquier otra mujer.



Al correr de los días me dirigí a un

Starbucks, como lo hacía normalmente, porque aquel era un lugar donde amaba beber café.

Me percato que delante de mi mesa, había otra donde yacía una mujer que me llamó un poco la atención, estaba sentada allí pero se encontraba sola y se veía muy distraída con su móvil mientras yo bebía mi café tranquilamente.

No le presté atención pero por más hermosa que sea nunca confiaba en extraños.

No me esperaba que me sucediera algo parecido al amor ya que aquello nunca solía sucederme. Volteó a verme y pude notar que era la misma chica que había conocido en el avión.

Nos sonreímos y nos saludamos, ella se sentó en mi mesa en la silla que tenía enfrente.

Le di un nombre falso no sé porque pero ella no pareció importarle aquello.

Su nombre era extraño pero lindo, se llamaba Alysha.

Me agradaba hablar sin que se me tiren encima. Ambos nos estrechamos la mano, le dije que me llamaba Brad.

Me contó que vivía aquí en Los Ángeles, que también tiene una mascota. Entre más hablamos más me agradaba pero no me gustaba llevarme por apariencias.

Me había contado que le encantaría llegar a ser modelo, bailarina o simplemente encontrar trabajo como fotógrafa. Le cuento más sobre mí pero ella no sabe que soy cantante, no quisiera que supiera. Le dije que estudio fotografía y demás. Se sorprende pero noto que alguien la ha llamado por teléfono y que tiene bastante prisa.

Le sonrío, le digo que me encantó conocerla que algún día la veré por éstos lugares pronto. Se despide y no tarda en llamarme por teléfono Tom, me pregunta cómo estoy y dónde. Él se preocupa mucho por mí y es por eso que hoy iremos a festejar nuestro regreso en algún sitio nocturno.

Suspiro y noto que he dejado la mitad del café, pero me doy prisa para poder ir a buscar algo de vestir para ésta noche.

Mas tarde, me dirigía con Tom hacia una tienda para compramos algo para ponernos. Ésta noche, quiero estar impecable y diferenciarme del resto. Al regresar a la casa, me encuentro con los Gs, han viajado desde Alemania hasta aquí sólo para reunirnos.

Veo que alguien rubio me saluda en la distancia con la mano derecha y yo hago igual.

Andreas está con Nat hablando entre sonrisas.

Los veo a Georg, a Gustav y no puedo creer que ya sean hombres, han crecido demasiado tanto como yo y mi hermano..si tan sólo ayer éramos unos niños, a decir verdad, éramos famosos desde jóvenes.

Al llegar hasta la casa con Tom, ellos nos reciben entre abrazos y risas. Sus muestras de cariño me hacen sentir más feliz que nunca.

Nos reunimos, nos preparamos, ésta noche será estupenda. Esta noche iremos para festejar el comienzo de un nuevo año para nosotros como banda.

Al llegar la noche nos vestimos para la ocasión, concurrimos a un sitio similar a un Resto Bar nocturno pero de esos dónde todos podemos divertirnos, después de todo estamos de fiesta.

Me dirijo hacia una mesa cuadrada, con ellos y me siento al lado de Tom. El ambiente era agradable. Nos traen algunas copas, nos servimos champagne y luego brindamos entre risas.

Entre que bebí algunas copas noto que alguien me saluda sin siquiera saberlo.

Se veía muy sexy pero sofisticada y su cabello tenia suave ondulado color rubio. Sus ojos estaban maquillados de color oscuro, perfectamente delineados. Sus labios eran carmín, se veian deliciosos pero era tiempo en concentrarme más en mi trabajo que en mujeres. Hablamos unos segundos y después al correr las horas, comenzamos a bailar y ella se me acerca más a mi cuerpo para bailar pegados por la música lenta que estaba sonando en aquel entonces.

Su silueta la enmarcaba aquel vestido color negro, pero no se veía como una cualquiera. Me conto sus gustos sin siquiera preguntarle. Le gustaba leer, viajar, pero no supo que era el vocalista de Tokio hotel y eso me mantenía tranquilo.

No sé porque … O debe ser por algunos tragos que he tomado que me están dejando llevar demasiado. Ella y yo nos besamos lentamente, sin darme cuenta, hicimos un suave roce de nuestros labios, ella comenzaba a acariciar mi espalda baja y yo comenzaba a necesitar detenerme.

Lamenté ese hecho pero ella me miro a los ojos, me dijo que todo estaba bien, que no me preocupara. Comenzaba a besarme con más fuerza y ganas que en la primera y no dudo un segundo. De repente nuestras lenguas se encontraron ansiosas recorriendo la cavidad contraria, dando suaves toques y roces entre éstas. Comenzó a desprender mi camisa de a poco y juntos, nos adentramos a un apartado en el que le pedí que se detuviera. Le explique rápidamente que yo no era de esos y ella comenzó a entenderme. Me abrazó y ambos nos salimos del sitio.

Para mi sorpresa los chicos se encontraban riendo y bromeando pero Tom estaba observandome.

En cuanto nuestras miradas se encontraron, él me guiñó un ojo mientras yo..no sabía que hacer, ni donde meterme, sentí mis mejillas arder.

                                    ***

Ahora aquella chica que conocí casualmente, tenía nombre.

Alysha me preguntó quiénes eran aquellos chicos con quién yo estaba, les dije que eran mis amigos y rápidamente noté cierta tensión en ella que logró apartarla de mí por un momento. Me dijo que se dirigía hacia la barra, que estaría allí si la necesitaba. Automáticamente le dije que no se preocupara mientras luego me dirigía hasta la mesa con los chicos. Ellos hablaban y bromeaban, noté que Tom se dio cuenta dónde estuve y con quien, pero su curiosidad se incrementó y se inclinó más a mí.

– ¿Quién es ella hermanito? ¿Ehh?-

Me habló Tom murmurando, acercándose a mi oído. Me habló en tono divertido, luego se separó y me miró con esa sonrisa típica en él mientras arqueaba sus cejas observándome. No supe que hacer, así que me ruboricé un poco sin poder evitarlo.

-Tom!! Sólo es sólo una chica, como cualquier otra!!-

Le hablé cerca de su oído algo avergonzado, no quería que los demas supieran. Solté una ligera risa inevitable de nerviosismo al encontrar mi mirada con la de Tom.

-No me veas así – le recriminé.

Sé que a ella le incomodó verlos a todos ellos, que esperaba que me encontrara sólo.

Entre que hablamos con los chicos, sin darme cuenta en eso llegaron las pizzas a la mesa.

De vez en cuando mi vista se dirigía hacia la barra. Me causaba curiosidad aquella chica, ahora ella estaba bebiendo delicadamente aquella bebida mientras se encontraba sola. Miraba sus labios, aquellos que habían rozado con delicadeza los míos. Miraba su cabello largo, algo ondulado por sobre su escote. Sin notarlo me dejo llevar por las sensaciones de aquél momento y se me escapa un suspiro sin poder evitarlo. Tal vez el alcohol de ésta noche me ha afectado lo suficiente o simplemente me estoy ilusionado por una simple chica que no conozco. No dejo de verla, siento como que el corazón se me escapa del pecho cuando me mira. Nos sonreímos. No sé que hay el ella que tanto me cautiva pero niego con la cabeza y desvío mi vista. ¿Acaso está escrito el enamorarse a simple vista? ¿Acaso está escrito perder la razón por una completa desconocida?

Al correr de las horas, volteo a verla y no la encuentro por más que la busque con la mirada. Mi desilusión se hizo notable al no encontrarla por ningún rincón del sitio donde me encontraba.

Me quedo algo pensativo mientras pasaban las horas pero me di cuenta que debíamos irnos con los chicos.

…….

Semanas más tarde..

-Pumba veeen!!!!! Buen chico!-

Lo abrazo entre risas y lo acaricio cariñosamente pero noto que alguien está detrás mío.

-¡¡No!!Joder!!!sal! N-no!!¡¡Basta! –

Río sin poder evitarlo, alguien me ha tomado desprevenido. Me trato de safar como puedo entre risas, me revuelco en el piso para así alejarme de él y sus manos en mis costados que me causan tantas cosquillas que a penas puedo moverme y hablar. Ya algo lejos de él, me encuentro recostado con la espalda en el suelo, lo miro desde abajo, él me sonríe con malicia. Nos reímos y pumba me lame la mejilla.

Suelto una risa y me levanto encaminandome hasta mi sitio.

Ésta vez, nos encontrábamos en el estudio, porque tratábamos de practicar un poco. Debíamos trabajar. Y a veces se divertían bromeando sólo para pasar el tiempo.

Al pasar los minutos..los chicos tocaban sus instrumentos mientras yo me dirigía hasta mi rincón, deseaba escribir algunas de las letras porque me sentía algo inspirado.

Suspiro y el silencio toma posesión del lugar. Los chicos están descansando mientras yo me encontraba aquí sentado, frente al monitor. No sé cuantos minutos han pasado. Rápidamente una imagen se me viene a la cabeza.

Recuerdo cuando bailamos lentamente, aquél aliento me acariciaba suavemente todo mi cuello. Un aire helado recorre mi espina al recordar aquello. Siento que todo ha ido rápidamente, espero volver a verla en algún sitio. No sé porque pero me estoy ilucionando tan rápido que no comprendo absolutamente nada de lo que me está pasando. Trato de escribir algunas líneas que me nacen rápidamente desde el fondo de mi ser.

“Me gustas simple..”

Porque podrías haber sido cualquier otra chica y aún así me fascinas, me encantas. No sé porqué lo escribo pero algo tiene sentido sobre ésas líneas.

“También me gusta la manera en la que caminas..luces tan bien. No sé si éste amor que estoy sintiendo está hecho para durar.”

Es lo que temo. Es lo que siempre he temido.

“Siento que estoy cayendo en el amor una vez más, que me ilusiono sin siquiera saberlo.

Siento que no la puedo dejar ir. “

Niego ante aquellos sentimientos confusos. No sé que me sucede pero me hundo una vez más entre aquellas fantasías irreales.

“Pero estoy cubierto de oro..”

Aquel metal tan resistente, me siento inmune ante todo lo malo, inmune ante éste sentimiento que está naciendo, ante ésta ilusión.

Reacciono y me doy cuenta que los minutos han pasado más rápido que de costumbre, que he estado pensando todo el tiempo en ella.

Tom está detrás de mí y noto su mano en mi hombro. Me dice que es hora de salir, así que me encamino con él hasta el auto.

Me dice que los Gs no estarán ésta noche. No sé que traman, tampoco recuerdo hacia dónde vamos.

Los lugares que veo desde la ventanilla se me hacen familiares. De repente estaciona y nos bajamos encaminandonos hasta..

                                               ***

Me siento tan confuso que no oigo que mi hermano me está llamando.

Nos encontramos en un sitio, a decir verdad en una fiesta. No sé que hacer aquí pero algunas celebridades me han saludado, me invitan a algunos tragos mientras me hablan cosas que no comprendo bien a causa de la música alta. No soy de beber mucho pero siento que debería hacerlo ésta noche. Suspiro hondo y me dejo llevar, me animo. En eso, alguien me saca a bailar y acepto. Bailo y noto que Tom se está divirtiendo tanto como yo, que me ve desde aquel sitio donde se encuentra. No sé con quién habla pero me mira y me guiña. Yo le sonrío, y la chica con quien estoy bailando se separa de mí sin comprenderlo. Saluda a no sé quiénes, que se acercan donde estamos los cuales me saludan tambien. No sé quienes son, no los conozco. Entre que hablan entre ellos, yo decido buscar algo que beber o salir de aqui. Camino por el sitio, me dirijo hacia donde se encontraba la bebida, me siento en una de aquellas sillas altas, cerca de la barra y el barman me pregunta que es lo que quiero. Pido vodka solo, ya que no quisiera cometer locuras.

Observo el ambiente mientras bebo con el sorbete, me quedo mirando el decorado que es muy casual y sienta bien. No se que pasará ésta noche pero en cuanto me doy cuenta están bailando y festejando con música divertida. En eso me toman del brazo, noto que es Tom.

Todos se divierten, yo solo me encuentro distraído y algo aburrido aquí. Tom me lleva con él y me presenta a una chica bastante atractiva, para que quizá la conozca o algo así, él nunca cambia.

……………

Una noche..

Ésta vez salí a dar una vuelta por la noche.

Caminé hasta no sé dónde. Me encontraba tan confuso ¿acaso la volvería a ver? No, jamás la volveré a ver..si tan sólo ése dia hubiera sido eterno. Rápidamente oigo pasos apresurados.

Me sorprende alguien acercándose a mí.

—Disculpe, joven..¿Hay por aquí..algún café cercano?—

Aquella voz la había oído en algun lugar. Volteé a verla y ..No sé como apareció alli.  Suspire sin que ella lo notara y caminé acercandome más. Observé su rostro, su cabello , su mirada. ¿Que hay debajo de la luna y las estrellas? Que hay debajo de éste cielo que queremos compartir.

Me mira, nos miramos sin entender. Me encamino hasta centímetros de ella.

No sé que me sucede ésta noche pero siento que debo amar a quien me ame de regreso porque me estoy ilusionando pero nada debe ser real.

— Disculpa, ¿hacia donde querías ir?—

Me mira. La manera en la que el viento juega con su cabello me provoca algo en mi estómago ..sus ojos están fijos en los mios y noto su mirada.

— ¿Brad?—

No se lo que dice, pero me está mirando.  Se sorprende y me dedica una hermosa sonrisa.

—Me da gusto verte otra vez— le digo como puedo.. ella me saluda con un beso en la mejilla.

Su aroma a flores que desprenden de su piel, me despiertan los sentidos.

—A mí también, Brad! ¿Que hacías por aquí?— Ella habla confundida observando si había alguien más.

Me pierdo en sus ojos, no sé que me sucede.

— Estaba caminando, sin rumbo alguno—

—Yo también, en cambio me dirigía hasta…una cafetería. Acabo de salir del trabajo — suelta una ligera risa.

—Qué bien. Queda bastante cerca ¿quieres que vaya contigo?.— le ofrezco compañía.

Comenzamos a caminar lentamente.

—Me encantaría Brad!

—vamos entonces, pagaré yo, si no te molesta— Agrego divertido. Encontramos el sitio  y después entramos los dos.

—Oh..descuida, no es problema. —Agrega y me mira, aquella sonrisa me hace estremecer.

Luego de un corto silencio ella elije una de las mesas que estaban entre medio. Suspiro y nos sentamos, pedimos un café para ambos.

—Bien, ¿a dónde trabajas?.— Le pregunto queriendo saber más de ella.

— A pocas cuadras de aquí pero decidí  caminar, despejarme ¿que tal tú?.— Me dice.

—Me encontraba aburrido y deseaba salir a tomar un poco de aire fresco.—

—En gran parte es bueno salir a despejarse y más si haz tenido un día agotador.  —Habla y bebe el café que trajeron.

—Es verdad.— menciono y no dejo de mirarla, se ve muy hermosa.

— ¿Eres de por aquí?— Le pregunto dudoso.

—No, no— En eso tose un poco por que bebió unos sorbos de cafe o creo que se sorprendió por mi pregunta.

—Queda lejos a decir verdad.— habla rapido y desvia la vista un momento mientras hablaba.

—Oh..

—Y ¿cómo te va?¿ Tú eres de por aquí?—me pregunta. Evito suspirar.

—Si..de hecho, no pero a veces camino y pues bien, aqui estoy. —

La miro y ella tiene algo que me causa curiosidad. No sé  si seran sus ojos o su mirada penetrante o kiza aquellos labios.

—¿vives sólo, o con tus padres? Me cuestiona. Aquello me causa gracia, no entiendo hasta que punto quiere llegar.

—Vivo sólo, pero la mayor parte del tiempo me ocupo mucho en mi trabajo

—Igual yo!!— Mira la hora y noto que tiene prisa..por como se apura a beber.. Lo vacia por completo en cortos segundos. Me mira y no comprendo que le sucede.

—Se me hace tarde, Brad, lo siento..

¿Nos veremos otro día?—

—Me encantaría! ..le digo alegre.

Pago y la acompaño hasta un par de cuadras.

— Estás segura que no quieres que te acompañe?—  le hablo bajo. Me mira desde cerca y de repente sus labios rozan los míos.. No se porque, me tiene con la espalda contra la pared. La luz de las farolas alumbran un poco  sus ojos. Me besa y sus manos recorren mi espalda con suavidad, no sé que me pasa pero me detengo, la miro y ella me mira también. Rápidamente me toma de la mano y ríe bajo, llevandome a no sé dónde pero me pide que no haga ruido. Estabamos en un sitio como un callejon bastante oscuro donde no había nadie, en eso ella me arrincona contra la pared entre la oscuridad. Sin más me dejo llevar..me siento cegado por esos labios tan suaves y tersos.

No respondo de mí y ella me besa con fuerza y sus manos me acarician mi torso por debajo de mi playera. Me vuelve loco.  Le pido que se detenga pero no puedo resistirme a su suave piel y la acaricio, ella suelta gemidos bajos  placenteros mientras me mira entre cerrando sus ojos.

Sus piernas me rodean la cadera y ella me roza su cuerpo y tambien su femeneidad y yo suelto otro gemido sin poder evitarlo.

—Shhh

Me tapa la boca y luego se quita un poco de mí. Está desprendiendo el boton y bajando la cremallera de mi pantalón. Sus manos se cuelan entre mis pantalones, me acaricia mi punto máximo de placer.

Muerdo mi labio para no hacer ruido, ella se inclina y lo toma entre su boca.

—Ahh-h. A-Alisha—

Suelto un gemido sin poder evitarlo, no sé lo que estoy haciendo pero siento que esto está mal.

—Shh!—

Me calla. Me hace presión con sus labios y muevo mi pelvis sin poder evitarlo buscando más profundidad en su boca. Nunca había hecho esto. Después se me subió con las piernas a los costados de mi cadera mientras su sexo pedía más placer con cada roce tan placentero. Me coloco un condón, pero me hizo sentir demasiado placer cuando se lo metió a su cavidad moviendo sus caderas con intensidad y deliciosamente. Se movió aumentando aquellos movimientos encima mío haciéndome explotar, dejando mi cuerpo agotado y la respiración agitada.

—Shh!! Viene alguien!—

Me susurra en el oído mientras me quedaba inmóvil observando desde donde estábamos. Un hombre de avanzada edad se encontraba merodeando. Al notar que ya no había nadie ella se acomodó el vestido, y yo me acomodé mi pantalón. Jamás he hecho algo como esto.

No era muy concurrido el sitio pero ahora debía despedirme de ella. Me dio su número y se encaminó hasta un taxi. Mi móvil comienza a sonar rápidamente..

                              ***

– ¡Sal de aquí! –

-¿Hola? ¿Tom? – Pregunto. Se escuchan ruidos molestos, ladridos y risas del otro lado de la línea.

– Bill!!! – Me dice con alegría.

-Si, Bill! Asi me llamo yo!-

Le respondo bromeando y él ríe un poco.

-¿Vendras? Se hace tarde ¿a dónde andas?-

Me pregunta preocupado.

– Ya voy para allá.- Le respondo.

No puedo evitar reír por escuchar a los chicos del otro lado de la línea. Están bromeando como siempre.

Camino mientras hablo con mi hermano por teléfono, él se preocupa demasiado por mí.

-No tardo.- Le aviso, hablamos unos segundos más y él cuelga.

Camino confundido por la escena anterior algo sorprendido y suspiro. La manera en la que apareció ella en mi vida es un misterio.

No tardo mucho en llegar a la casa y me reciben los Gs, justamente estaban saliendo de allí.

– A dónde van?-

Les pregunto y ellos responden que a traer bebidas.

Al correr de las horas habíamos cenado todos juntos y llega la hora de dormir, cada uno se dirige a su propia habitación.

……

A la mañana siguiente..

Despierto y me dirijo hacia la habitación de Tom, lo llamo por su nombre y él me mira entre dormido.

Ría no está, por la suerte que tengo. Entro y me siento a su lado.

-¿Tom? – Le hablo claro .

-¿ Recuerdas a la chica que estaba con pumba a la salida del avión?-

– si, ¿quien es?-

-Alguien que conocí..-

– ¿A dónde?-

-Tom joder! Acabo de decírtelo! – Le empujo muy despacio en su hombro soltando una risa

-¿Te gusta?- Me pregunta.

-Tengo su número, sí, me gusta-

-Invitala a salir!-

-Lo peor es que no me conoce. Para ella soy “Brad” y…no le dije mi verdadero nombre.

– Llevala a un hotel!-

-¿Tu crees?-

-Si, anda, vamos a desayunar-

…..

Entre que bebimos el desayuno, tomé mi móvil, busqué su número y comencé por escribirle.

Mensaje de texto:

“Hola, soy Brad, por la mañana tengo mucho trabajo, pero me encantaría verte pronto.”

-Vamos, a trabajar, Bill..-

Me habla tom.

……

Horas mas tarde..

Me concentro en el monitor.

Me concentro en aquella noche.

“¿que hay bajo la luna y las estrellas?

que hay bajo lo cerca que estamos..”

La miré y ella también, nos dejamos llevar por un simple e inocente beso, por un impulso.

Tú me haces sentir como que vuelo.

Porque es una tormenta perfecta la manera en la que fusionamos nuestros cuerpos. Me haces perder el control, me haces perder en el paraíso.

Cierro los ojos un momento, tratando de descansar la mente.

-Bibi! – me sobresalto. Después le sonrió. Es Tom. Me habla al oído pero me pierdo entre mis pensamientos.

Cierro los ojos y la veo..Es como si fuera la única entre tantas. Sus piernas me hacen fantasear, está sobre un piano, está tocándolo delineandolo con sus delicados dedos y a la vez me hace gestos sensuales, se muerde el labio. Su voz suave me desconcierta totalmente.

Sus ojos me hacen perderme una vez más. De repente se me acerca cantando con ésa suavidad, su voz se cuela en lo más profundo. La miro y me guiña, después se me acerca me provoca tanto con esos labios y esa mirada cautivadora.

Despierto automáticamente. Caigo en cuenta que me dormí con la cabeza sobre mis brazos que estaban apoyados sobre mesa. Miro hacia la voz que me hablaba.

-¿Bill? –

Abro los ojos y él me mira sorprendido.

-¿Tienes sueño?

-No..simplemente es..no es nada.- Estoy tan cansado que apenas duermo. A penas presto atención. Él lo nota y me jala del brazo como si yo fuera un niño.

-Ven, vamos, haz hecho mucho trabajo por hoy.-

…….

Días después…

Salí de la casa, encaminandome hacia mi coche, saludé a Tom y me marché. Me dirigí hasta la dirección que me recomendó mi hermano y la esperé impaciente.

Al verla asomarse por la puerta, salí del auto, y camine hasta donde se encontraba ella.

– Una habitación para dos por favor- Le pido al Señor que se encontraba allí, le extiendo el dinero y la llevo a ella con mi brazo alrededor de la cintura en cuanto me dan las llaves.

Caminamos juntos hasta la puerta. Entramos, al cerrar la puerta detrás de mí

Suspiro, pero ella se siente impaciente me esta besando el cuello, no sé porque pero estabamos a oscuras. Se desvistió rápidamente. Sus labios se veían por la claridad de la luz de la luna, sus labios carmín me estaban llevando a la locura. Nos vamos hacia la cama pero ella toma el control y quedo debajo de su cuerpo. Entre besos suaves y delicados me quita el pantalón que llevaba puesto, me acaricia, toma mi dureza con sus manos, en vaivén. Las mueve bastante bien, no sé que me sucede pero me siento en las nubes.

Ella se posiciona sobre mí siento su humedad como se mueve por mi longitud. Se mueve lento, tan lento que me provoca gemir.

Luego noto como se lo introduce, no deja de moverse, me está matando.

-AAHH!..no pares- Gemi alto. Me vuelve loco su cadera, ella la mueve suavemente pero comienza a acelerar cada vez más.

-H-Hmm..Brad!! Ahh..- Oigo sus gemidos tan sensuales que me provocan suspirar.

-M-me corro ,sal!! sal..por favor.- Le ordeno, luego hace lo que le pido.

Siento la suavidad de sus labios en mi erección..no sé porque pero me siento cómo me pone. Con cada roce me lleva al paraíso.

Su lengua delinea con esa suavidad tan exitante, me pierdo más y mas entre el extasis de sus labios.

No sé que me sucede pero tiemblo con cada caricia, mi corazón se acelera de una forma que no comprendo.

-Ahh..m-me ..-

Oí que tosió por la intensidad en que salió. Me provoca tanto cuando me mira de ésa manera. Me miró y limpió los restos de mi semilla. Luego se me subió encima.

Nuestras bocas se unieron, nuestras respiraciones estaban agitadas.

Sus labios me besan y después ella comienza a rozar su cuerpo contra mi masculinidad.

Me hace suspirar en la manera en que me besa y delineo con mis manos sus suaves curvas tan perfectas. Comienzo a exitarme de cierta forma otra vez, al sentir sus labios delineandome. Pellizca mis pezones toma mi carne y se la mete a la boca, palpito dentro de ella, no sé como lo logra pero me ha hecho otra erección, y me pide que la penetre con rudeza, que se lo haga duro.

Se pone en cuatro, está inclinada sobre la cama, sus brazos posados en la misma y su trasero está alzado hacia mí. La tomo de las caderas, la embisto con rudeza y fuerza mientras gimo en repetidas ocasiones. Me muevo dentro y fuera de ella con la poca fuerza que me queda.

Ella me brinda su humedad y me hundo más profundo en su interior. Mis movimientos se incrementaron más y más y ella gemía gritando.

-Ahh brad! Más, Más!-

Me pidió a gritos y la seguí embistiendo más rápido hasta que por fin me corrí en el condón.

No sé por que pero me dió besos juguetonamente, me lamió mi torso pero me estremeció en cuanto sus manos me recorrieron por completo.

Me dio mordidas suaves y me azotó las nalgas.

No sé porque comenzó a rozar sus senos por mi entrepierna

-Lo siento, no doy más – le recrimine algo exhausto. Pero en cambio me besó y acarició mi espalda.

-Esperame algunos minutos más, así me repongo-

Le murmuré al oído, ella me acarició y me dio besos húmedos por todo mi cuerpo.

Suspire y pude ver su cuerpo blanquecino con la luz que me brindaba aquel cuarto.

Delineé sus curvas con las yemas de mis dedos, disfruté su tacto, suave. Sus senos, los acaricié con mis manos pero metí uno a mi boca y ahora estaba arriba de ella disfrutando sus pezones erectos rozandolos con mi lengua.

Sus manos se colaron entre nuestros cuerpos y me tomó mi miembro, lo acarició de tal manera que logró que endureciera con solo su tacto.

Me acarició apreto el agarre y entre gemidos la tomé por tercera vez. Abrí sus piernas y las acaricie disfrutando su tersura.

Acaricié con mis manos su femineidad estaba tan húmeda para mí, pero gemí en cuanto ella apretó el agarre.

-AA-Hh!-

-Brad…tomame de nuevo-

susurró con su rostro entre excitación y lujuria ..sin dudarlo lo hice.

Me hundí en su interior de a poco , movi mi pelvis con pequeños golpeteos..su humedad se apoderaba de mí. El placer tomaba posesión de mi cuerpo una vez más, entre gemidos y jadeos nos corrimos y yo en el condón.

Me sentía totalmente exhausto.

Al ver la hora..era de madrugada no quería moverme, deseaba dormir todo lo que restaba de la noche. Estabamos en un cuarto de hotel, jamás había pasado por mi cabeza todo ésto, o que terminaria así aquí.

-Alisha..-

La llamo por su nombre. Ella me mira. Se ve exhausta también, sé que la pasó bastante bien tanto como yo.

-Perdoname..Te he mentido en todo.-

Ella me mira frunce el ceño, está sorprendida por lo que le acabo de decir..

                                   ***

-¿Qué tratas de decir con éso, Brad?-

No sé si está enfadada o simplemente impactada.

Suspiro hondo y ella me mira entrecerrando sus ojos, me está examinando con la mirada.

– En realidad, mi nombre es Bill, Bill Kaulitz.-

Le hablo suave, ella me mira en silencio.

-¿Porqué?-

Me pregunta y sé que le causa interés, sé que alguna vez habrá oído de mí pero no estoy seguro.

-Hay muchos como yo, que tratan de esconderse de tal vez los medios, porque yo en alguno tiempo pasado fui famoso ¿Sabes quién soy?-

-No. ¿Quién eres ?-

Niega. Siento que no le importa en absoluto.

– Soy el vocalista de Tokio Hotel.

-¿Si? Entonces no te molesta si…seguimos conociéndonos?

Suelta una risa suave. Me acaricia el pecho. Perfecto, no le importa en absoluto.

-¿No te molesta que te haya ocultado todo aquello?-

-Para nada-

Su voz sensual se incrementó de tal manera que me hizo estremecer.

Coloca sus piernas a cada lado de las mías. Noto sus juegos, lo que quiere intentar.

Hay una llamada a lo salvaje, ella cuenta hasta tres y pierdo el control. Me está volviendo loco sus caricias son tan suaves.

Me propina besos por mi pecho, tira de los pezones sabe que me gusta, que me esta haciendo perder el control.

Su lengua se apodera de mi cuello, me hace sentir un escalofríos, me estremece.

Sus manos me provocan, me recorren completo con suavidad y después noto sus besos bajan hasta la parte interna de mis piernas. Acaricia mi pecho pero después delinea mi punto máximo con la punta de su lengua, me estremece, siento que toda la sangre se dirige hasta un punto en especial. Me provoca..nos acaloramos pero ésta vez se separa alejandose. No comprendo. Se acaricia en frente mío, sus manos se deslizan desde su abdomen hasta sus pechos, apreta aquellos, los mueve entre sus manos. Tira de sus pezones y hecha su cabeza hacia atras ,luego juega otra vez apretando sus pechos, masajeandolos de una manera provocativa. Me gusta lo que veo, como se acaricia.

Sus dedos se dirigen hacia su entrada, la manera en que se muerde el labio me está provocando de una manera que no comprendo.

La noto gemir placenteramente, sus ojos se entre cierran veo que lo esta disfrutando al maximo. Se penetra con esa delicadeza, está en lo suyo.

Sus dedos entran y salen, se encorva y estira su cuerpo pero de repente la ayudo. Se encuentra de pie lo cual me le acerco por detrás de su espalda. Reemplazo su mano por la mía. Sus gemidos me estan poniendo y siento que no doy más.

Entre abre sus labios y lleva sus propios dedos a su boca.

-No puedo más –

Le susurro excitado en la manera en que la veo lo que hace. Sus dedos siguen en sus labios. Mi dureza roza entre medio de sus muslos y me pide, pide que la tome.

Mis manos se situaron en su cadera a cada lado y apreté éstas, pequeños roces hacen que ella suelte quejidos, su humedad está tan cálida que me hace querer jugar un poco más.

De repente empujo en su interior, de manera brusca, se retuerse sus gestos placenteros me provocan y ella se inclina un poco para que la penetre más dentro de ella. Suelta grititos placenteros. Le doy nalgadas y la embisto duro, aquellos movimientos se tornan más apresurados y ella gime como que grita mi nombre una y otra vez, hasta correrme rápidamente en el condón. Mis piernas tiemblan.

Nuestras respiraciones estaban agitadas creí que me desmayaria sobre la cama pero no fue así. La chica se dio la vuelta , me arrinconó contra la pared..y se bajó, se quedó de rodillas a delinear, a quitar los restos.

Me enloquece, me provoca..ella me lleva a la locura.

…..

Meses más tarde..

– ¿ Quieres ser mi novia?-

Le hablé me sentía totalmente emocionado.

-Si, por supuesto-

Su sonrisa es tan hermosa.

Unimos nuestros labios en un fogoso beso, ella me besa tan suavemente, tan delicadamente que me hace sentir absolutamente de todo.

Me lleva de la mano, está riendo. No se donde me lleva.

Nos sentamos en una banca, se ve el horizonte, la manera en la que cae el sol me hace querer besarla sin siquiera separarme de aquellos labios tan tentadores.

Nos interrumpe algo. Oigo su móvil sonar insistentemente, me sonrie amplio pero en cuanto le atiende, su rostro cambia. Al colgar, baja su mirada.

-¿Qué sucede?-

La miro no comprendo cómo es que su rostro cambió repentinamente.

                                   ***

Rápidamente noto aquella sensación de tensión entre nosotros.

Se pone de pie y camina, no se a dónde quiere ir, hacia donde se dirige. Entre risas jala mi mano para que camine detrás de ella. No sé que le ocurre, no sé que fue lo que le dijeron pero siento que está distraída. De repente he caminado lo suficiente porque nose donde nos encontramos, hay muchos arbustos y estamos lejos de la ciudad.

Me tira al piso y se tira encima mío, me besa con aquella pasión, aquella suavidad y siento sus labios cómo se apoderan de los mios otra vez. Nos besamos lentamente, siento su lengua examinando mi cavidad. Juega con mi lengua, da toques con la suya y me hace suspirar. Su mano se cuela debajo de mi playera me acaricia con ésa suavidad de sus manos. Jadeo al sentir que tira de mis pezones algo fuerte, jadeo entre su boca y ella se mueve encima mío me roza, me estremece, noto que toma mi miembro entre sus manos con fuerza. La mezcla del dolor y la exitacion se me mezclan hasta nublar mis sentidos por completo. Se separa soltando risas, no sé de que se ríe pero toma mi erección con más fuerza y la está moviendo entre sus manos no sé la agilidad que tuvo para colar sus manos entre mis pantalones sin que me diera cuenta.

Sus manos se mueven velozmente sin cortar el ritmo pero de repente se detiene..me hace arquear la espalda, me hace que me quede con aquel gemido atascado en la garganta.

Está bajandose su vestido o su blusa, no sé bien ya que me siento totalmente en las nubes por lo que me hace sentir.

Se tira encima de mí pero siento como el calor me invade mi punto máximo.

Oh..me está haciendo lo que nunca pensé que haría. Sus pechos estan rodeandome mi miembro y los mueve tan suavemente, me está matando..lo hace tan deliciosamente bien. Sus movimientos continuos me hacen llegar hasta mi punto máximo. Cortos segundos mi semilla está sobre sus senos..ella se muerde el labio no sé a dónde se dirije ahora. Se ha colocado su prenda y me llamó con un gesto con su mano. Estoy echado en el suelo observándola, recuperandome de lo que me hizo segundos antes. La manera en que camina con aquella sonrisa en sus labios, el vestido que se puso enmarcan aquellas curvas, ésa silueta, me gusta todo de ella. La veo marcharse.

¿A dónde va? Me pregunto y hago en intento de ponerme de pie, me encamino detrás de ella, colocandome bien el pantalon que ella bajó.

Me dirijo por un camino pero me sorprendo al ver el sitio. Al silencio lo invaden los sonidos de aves, pero de repente no la veo, la pierdo de vista. Camino un poco más observo el agua de aquel sitio tan paradisíaco.

La veo, ella está en el agua. No sé que lugar es éste pero el agua es cristalina y diversas rocas adornan aquel lago, se ve tan hermoso. Su cabello está algo mojado lo que me indica que no saldrá de alli.

Suspiro y voy hacia ella, únicamente me quito la playera y lo que tenía dentro de mis bolsillos adentrándome hasta donde esta ella.

Me mira y se nota la oscuridad de la noche cómo se hace presente cada vez más.

Me besa, me acaricia mi espalda y mi pecho, sus manos me acarician sin prisa, pero las baja y me toma por los muslos, los cuales aprieta y me atrae más hacia ella. Otra vez estoy cayendo en su juego tan tentador. Me apodero de sus senos los cuales lamo e introduzco a mi boca.. Muerdo uno de ellos, ella grita placenteramente. Me acaricia otra vez con esas manos tan suaves, me está pidiendo que lo haga por la manera en que quita mi pantalón, lo baja otra vez.

Sus brazos estan al rededor de mi cuello y sus piernas rodean mi cadera, estamos en el agua y no está tan fría como pensaba. La noto que se esta moviendo, se esta penetrando ella misma lo que provoca que gimiera entre su boca. La sostengo de los muslos sintiendo aquella sensación tan genial, está tan cálida que me provoca disfrutar, logra que suelte sonidos placenteros. Sus movimientos son cada vez más apresurados, su cuerpo se frota contra el mío, y su cadera se mueve más y más rapido, más apasionado lo que logra que me termine con correr ..

Pasados cortos segundos, al notar que nuestras respiraciones se calman, ella deshace aquella posición. Siento como que mi alma de desprende unos segundos y luego vuelve a mí. Me salgo del agua y la saco de alli como si fueramos recien casados. La tomo entre mis brazos y camino con dificultad llevandola hasta suelo firme.

Nuestras prendas están mojadas, pero las retorcemos para quitarle el agua, luego nos marchamos.

-A dónde vives?

Niega con la cabeza. No..ella no quiere ir a su hogar..¿la han echado? No sé pero me dice que no quiere regresar alli.

Me apeno pero la llevo conmigo de la mano hasta mi casa con los chicos.

Al llegar ellos me miran. No sé que les sucede.

Hasta Ría esta alegre y no sé porque.

Ella se da mucho con los chicos..se pone a conversar..es tan linda.

Mi hermano me frena el paso cuando voy a la cocina. Me felicita pero me dice que no me ilusione tanto..que nada es para siempre.

No le hago caso y me dirijo hasta ella ofreciéndole bebida.

Nosotros somos jovenes, tenemos los ojos abiertos, pero a veces nos encontramos cegados por las luces de la ciudad, nos entregamos a quién queremos, perdemos el control para sentirnos vivos.. Sólo un día en aquel paraíso. Bajo el cielo de diamantes sólo estamos tú y yo. Siento que el amor es nuestra gasolina, que estamos viviendo en este sueño sin fin.

Al correr de las horas estabamos en mi habitación.

Ella está en mi cuarto..me mira con esa cara de traviesa, me da besos en mi cuello, nose resiste a mí. Ella provoca tanto en mí que creo que me estoy enamorando. No quisiera que esto acabara..

                                        ***

Despierto de a poco, pero noto que alguien esta sobre mi cuerpo.

Me desperezo estirándome un poco en la cama y observo aquella hermosa cabellera larga y castaña posar sobre uno de mis brazos.

Veo que el sol ha dejado la habitación con algo de claridad, lo que me hace apreciar mejor la silueta que está durmiendo sobre mi. Siento aquel aroma intenso cerca de mi, aquel aroma dulce a flores..Su perfume cautivador está impregnado en mi piel. Acaricio la espalda desnuda muy suavemente y la mujer que tengo encima de mí me comienza por acariciar mi pecho. Mi vista se dirige hacia aquélla zona prohibida. Estamos algo destapados por lo que mis manos viajan hacia sus gluteos.

Está sin bragas y puedo sentir cómo aquella piel expuesta está a mi vista.

No se porqué.. Ésos besos que deja sobre mi pecho me están volviendo loco.

Me hace suspirar de gusto, sentir aquellas manos suaves sobre mi piel cálida me llena completamente, me estremece.

Sus manos viajan por mi cuerpo, lo acaricia con la suavidad de una pluma y sus ojos me miran.

-Buenos Días-

Me dice, su voz suave y sensual que me desconcierta, es muy hermosa.

-Buenos días cariño.-

Mi voz choca contra sus labios, siento cómo lo que siento por ella me sofoca..me quemo, me gusta esa sensación.

Nada de lo que haga ella podrá cambiar lo que siento. Suspiro y siento aquellas caricias por mi abdomen, mi piel se eriza rápidamente por su contacto.

Besa mis labios pero la rodeo con mis brazos lentamente pegandola más a mí cuerpo.

Luce tan bien despeinada. Nuestras bocas se fusionan en un apasionado beso, mi respiración se dificulta. Sonidos placenteros salen de nuestros labios, y nos acariciamos lentamente colmados de placer.

Entre besos nos entregamos nuevamente a aquel juego.

Su piel blanca, es tan perfecta que puedo notar algunos lunares recorrer su piel. Nuestro beso se vuelve más intenso, nuestras lenguas rozan ansiosas buscando más contacto..hasta sentirnos acalorados.

Cambiamos de posición y ahora yo me encuentro encima de ella, recorro su piel con mis besos, su aroma me hace divagar, me hacen suspirar nuevamente. Mis besos se dirigen más hacia el sur. Mis dedos viajan por su piel, la recorre entera hasta llegar a su punto máximo. Acaricio aquella humedad provocada por mí, acariciando su femineidad de manera experta, moviendo ésta con suavidad haciendo circulos mientras la miraba atento a sus reacciones. La chica se remueve de placer, mueve su cadera , noto que tensa su cuerpo, se contiene soltando gemidos.

Su boca se encuentra entre abierta. Ésos labios me hacen fantasear.

Inclino mi rostro más hacia su sexo y

Sus manos tiran de mi cabello cuando me hundo en su interior, aquea su cuerpo y sus dedos me tiran de mi cabello un poco más.

Mi lengua entra y sale despacio, provocándole gemidos que no puede contener.

Se deshace bajo de mí , ella toma mis manos las jala hacia ella y se las lleva a los labios.

No!!…¿porqué haces eso?

Me dije para sí..

Un intenso placer recorre todo mi cuerpo, mi entrepierna. Su lengua lame aquellos dedos con su propia humedad. Me mira juguetona y se relame los labios.

Sus manos me recorren mi longitud, hace que me sostenga con una mano de la pared que tenía a un costado.

Logra que suelte gemidos desesperados.. Sabe lo que provoca, lo que está haciendo me esta provocando de cierta manera..me esta matando.

Mis ojos se cierran al notar sus manos apretar el agarre y moverlas en torno a mi miembro.

Mis manos acarician su senos, los aprieta y la tomo de las caderas rápidamente, ya no podía más. Se deshace de placer al notar que una de mis manos se movían sobre su femineidad.. y sin más la penetro fuertemente, al oír que me quiere dentro de ella.

La penetro con rudeza, ella grita y sus manos, sus uñas recorren mi espalda.

Ambos nos corremos, caemos exhaustos sobre la cama..y yo sobre ella.

Nuestras respiraciones se calman de a poco y acaricio su mejilla.

Mis besos llegan hacia su cuello, su aroma me hace flotar en el aire, con ella estoy totalmente perdido.

Perdido en el perfume de su piel.. Perdido en sus labios. Aquellos que me provocan sensaciones únicas. La beso y nuestras lenguas se unen acariciándose con suavidad, mis manos recorren su mejilla.. Su cabello..

-Eres la mujer más hermosa que he conocido-

Le digo contra sus labios.

Ella ríe suave ante mi declaración, y la beso..la beso sintiendo aquellas sensaciones placenteras recorrerme entero.

Lo siento todo con ella ..doy vueltas y vueltas porque ésto me está llevando a lo que nunca imaginé.

-Te amo-

Susurro entre sus labios, aquella palabra la suelto sin siquiera pensarla. Ella me mira ..la noto confundida con lo que acababa de decir.

Me empuja suavemente hacia un costado.

Se sienta en la cama..se aleja de mí. No entiendo que le sucede..pero se está vistiendo. La imito, siento que algo está mal.

Ella lo esconde todo en una mascara..que a simple vista lo esconde todo disfraza todo con una sonrisa.

Supongo que se dirige hacia el baño, pero en algunos segundos mi hermano golpea la puerta, me dice que la chica con quien estaba salió de la casa sin despedirse.

No comprendo que he hecho mal..no sé porque se marcho de esa manera.

Reflexiono sentado en la cama. Pero me encamino cortos segundos hacia fuera de la casa, la busco con la mirada y echo a correr por donde supongo que se encontraria.

Veo aquella figura a lo lejos..la veo sentada en una banca.

Aquella imagen me causa cierto sentimiento de tristeza dentro de mi pecho. Me dirijo hacia ella, y se sorprende de mi aparición.

Suspiro pesadamente la observo y la rodeo con mis brazos en cuestión de segundos. Siento que algo está mal pero no me lo dice.

Me siento algo mal, pero a la vez no quisiera presionarla a hablar.

                                  ***

Ella me mira, noto sus lágrimas. Están conteniéndose aquellos hermosos ojos almendrados color café.

Busca las palabras correctas para decirme o eso parece.

De tantas preguntas sin respuestas que me salen de la nada en mi mente por tanto pensar, algo de lo que se me cruza en mi cabeza está logrando que reaccione de una vez.

Algo me hace abrir los ojos, logre pensar cosas sobre ella. O tal vez desconfiar de sus palabras no sería algo bueno.

Ahora que lo pienso mejor, no la he conocido lo suficiente, como casualmente acostumbro a hacerlo. Por ella he roto las reglas.

Todo sucedió en algun lugar, una noche , donde la compartimos los dos, juntos , bajo el cielo de diamantes, bajo la luz de luna.

Un beso, una caricia, me recuerda al sol . Me he llegado a dar cuenta que no era suficiente, que queríamos más el uno al otro.

Queríamos embriagarnos de aquella lujuria que nos cegaba, queríamos sentirnos vivos.

Me mira y la veo soltar un suspiro cansado, baja su rostro mirando hacia el suelo y me dice que lo siente, que debe irse cuanto antes.

Le pregunto si la podía llevar y ella se niega.

Me da un beso sobre mis labios y se marcha. Yo no la detengo. Creo saber el motivo por lo cual ella se siente algo molesta, algo mal por alguna razón.

La veo caminando, alejándose de mí. Me quedo como un imbécil mirandola irse hasta que desaparece de mi vista. Luego me encamino hacia mi casa.

En un lapso de minutos de llegar, me reciben los chicos me preguntan que ha pasado.

Observo mi móvil y en éste está la imagen, la fotografía que le saqué aquella vez en el parque.

Suspiro, ella apareció como un huracán en mi vida. La desordenó totalmente como quiso.

Aquellos labios provocadores me sacaron una sonrisa. Su voz tan dulce, tan seductora.

¿Qué sé sobre ella? Al menos.. No, no se absolutamente nada. No se nada sobre ella ahora que lo pienso.

Alysha o Alissa ni sé como se pronuncia pero su nombre me gusta y tiene algo que lo hace encantador, me fascina.

Me duermo una siesta.

Me encontraba en una barra pero había una bailarina en un costado del sitio.

Mi vodka.. no lo necesito, veo con atención cómo la mujer que está frente a mí se me acerca. Ella trae consigo puesto un antifaz, y su traje de baile es impecable.

Sus caderas me hipnotizan. Se mueven al compás de la música.

De repente me veo completamente sólo, con ella.

Todo está oscuro y pareciera bailar debajo del único reflector de luz.

Ahora que la veo mejor, tiene un uniforme. Aquel velo cubre sus ojos, no me deja verla a la perfección..también tiene un cinturón que de él cuelgan monedas que logran ése sonido tan llamativo cuando mueve sus caderas.

Bebo de un trago la bebida que tenía, noto que tiene una falda tipo harén con algunas capas, y luce un top ajustado adornado con monedas y brillos. Se ve muy hermosa. Deja al descubierto su vientre donde se le nota un piercing en su ombligo. Bebo de mi bebida una copa más fuerte. Noto que está mirándome y me dedica un baile.. No sé quien es, pero se me acerca.

Me baila, mueve sus caderas y se oye cómo la música invade el ambiente. Ella se mueve al compas de la música. El movimiento de su cuerpo es hechizante.

Me besa, me desprende la chaqueta noto sus manos ansiosas recorriendo mi pecho. Se ve tan sexy con ese vestido corto que sólo logra que la tome de los muslos y aprete éstos con fuerza.

La veo otra vez, se aleja. Su cuerpo me está provocando..sus caderas se mueven al ritmo de la música otra vez.

Despierto, estoy en mi cama.. Y me avergüenza que ése sueño me haya provocado una erección.

No sé porque recuerdo el día en que la conocí.

Tan suave tan ardiente, no pares, tú comenzaste.

Un toque una caricia..hasta el amanecer, nos desvanecemos, lo sentimos todo.

…….

Tres semanas después..

Habían pasado semanas desde la última vez que la he visto.. No llegaban ésos mensajes de texto que tanto le enviaba ni tampoco podía hacerle llamadas. Nada concordaba..me sentía bastante frustrado.

Camino de un lado a otro mi hermano me observa.

¿Qué ha sido de ella? Su móvil se encuentra apagado o fuera de servicio tal vez.

Han sido varios días desde que la vi por última vez.

Me siento perdido En mi mismo.

¿Quién eres Tú? ¿Quién soy yo? En qué me he convertido.

Las palabras que imagino en el espejo

Me crean escalofrio.

Desearia que me salvaras que me devolvieras a la vida.

Ver su cara

En la multitud

Un millón de veces y aún así no encontrarla.

Minutos más tarde oigo el teléfono sonar. Al ver la fotografía, una sonrisa se me forma. Era ella.

Sonreí algo alegre, sentí un aire helado recorrerme entero.

Estamos..

en el telefono y

cada palabra que me dice ella me ésta matando.

No sé de que habla.

No podemos vernos, según ella.

¿Porque no? Me dice que está castigada. Que no la dejaran salir de su casa.

De repente se corta la llamada misteriosamente.

Marco su número y el operador me dice que el teléfono se encuentra apagado.

¿Qué demonios?

Me apena haber oido aquellas palabras, no quisiera que le pasase algo malo.

Suspiro observando su fotografía en el teléfono. Observo su hermosa cabellera y sus labios tan seductores.

Me ilucione de una completa desconocida, no sé ni dónde vive pero trabaja cerca del café donde yo me dirijo pocas veces.

Me siento débil. Mis suspiros por ella se hacen frecuentes.

Mi hermano me lleva con él hasta su habitación cerrando la puerta tras él. Se me acerca.. Su rostro de preocupación se hace notable.

-¿Estas bien Bill?-

-¿Qué pasó con la chica con quién estabas? ¿Porqué salió así de ése modo? ¿Ni se despidió hermano?-

Sus preguntas me hacen mirarlo, no encuentro palabras para decirle.

Suspiro y pienso sobre lo que me dijo ella.

-Esta castigada.- Le respondo a mi hermano. Levanta sus cejas está sorprendido.

                   ***

Dos semanas después….

Habían pasado dos semanas y no he tenido una noticia de ella..¿qué pasó?

Mi hermano me mira, me dice que me ve desanimado, me invita a una copas. Él quiere que caiga en la realidad, que me dé cuenta que nada es para siempre, que los finales de cuentos no existen , que soy muy inocente frente a ése tipo de cosas.

El último suspiro acaparó mi pecho, dejé el móvil sobre la cama, al fin ella nunca llamará. -Se ha olvidado de mí! Maldita sea! -Gruñi al imaginar su bello rostro mientras me dedicaba a pensarle por última vez, me encaminé hasta la cocina donde estaba mi hermano.

Él tenia un par de botellas de cerveza sobre la mesa, yo tome la botella sin más, y bebí su contenido hasta donde podía. No tardo en hacerme efecto, que después de comenzar a beber la otra botella, mis piernas se debilitaron, logrando que camine con torpeza hasta el sillón donde por fin me sente.

“A veces no sabemos lo que ha de venir siento que nuestro principio ya había comenzado

Y ahora tenemos que ejecutar.

Cuando no hay marcha atrás me pregunto

¿Dónde has ido? Usted me hizo sentir tan fuerte ..

Es oscuro, a pesar de la luz,

El mañana no está en la vista

Vamos a correr y no mirar hacia atrás..

Justo en el mejor nomento, ella había desaparecido.

De momento cuando entre cierro los ojos, escucho mi movil llamando

Me encaminó como puedo, mis pies fallan y hace que caiga al suelo.

Imposible.. Mi corazon se me encoge cuando todo está en silencio.

Luego se escucha sonar nuevamente..

Gateo como puedo y le doy en contestar.

-¿Bill?- . Es ella, su voz se nota preocupada y noto que está sola.

-Cariño..

– Le respondo atento, con dulzura, noté que ella suspiró.

– ¿Nos podemos ver ésta noche?

– Me dice.

-Esta..noche?

– cuestiono, las copas hicieron efecto en mí por lo que siento que esto no es real.

-si, vamos por favor.- Me suplica

-No sé..¿ Porque no vienes? –

No entendía la conversacion inútil que estaba teniendo con ella.

-ir? Pero ellos me aceptarían?- Su voz cambió a una suave.

-si, como que no!

– hablo esperando la ansiada respuesta.

-ire allá –

-Está bien cariño.

– le respondo y en eso noté el silencio.

Cortó.

Con mi estado, mi cuerpo estaba adormecido por el alcohol..tal vez era un sueño , y estoy dormido.. Negué ante los estúpidos pensamientos.

Horas más tarde el timbre suena…

                           ***

Me dirigía hasta el baño, supuestamente debía lavarme con agua fría el rostro hasta que se me quitase la poca ebriedad que alcancé a tener ésta noche. Caminé hasta la puerta de entrada a recibirla. El corazón se me detuvo un instante. Se veía tan hermosa con ése vestido que ha elegido, el cabello tenía suaves ondas y su piel de terciopelo ..

– ¿Bill? -.

Oí su voz y sacudí mi cabeza, me perdía en sus ojos, y en cada vez que ella me hablaba.

-Adelante! -.

Le digo abriendo la puerta, ella pasa, su aroma a flores no se porque me hace suspirar.

-Toma asiento-.

Le hablo y la miro fijamente, está tan seria o a la vez sorprendida por algo que no comprendo.

– Bill, me tengo que ir de viaje no tardaría en volver-. Habló demasiado confiada.

La miré atento pero sin dudarlo me acerqué a ella, me arrodillé y tomé sus manos entre las mías. Aún mareado por el alcohol, acerqué mis labios a los suyos dándole un fugaz beso, mis labios se movieron contra los suyos y de repente sentí como esas oleadas de sentimientos volvían a azotarme con fuerza mi interior, mis sentidos se nublaron un momento, me perdí entre sus besos, su lengua quería apararar cada rincón de mi boca, rozamos las mismas y de repente me senté en su regazo nuestros labios se movían ansiosos y nuestras lenguas ansiaban por más contacto.

Sentí como ella se separó de mí, en cambio la miré sin comprender absolutamente nada.

-Bill-.

Ella habló, tan fríamente en cambio mis manos acariciaron su mejilla muy suavemente.

-Bill, tengo que irme de viaje, ahora.-

Frunci el ceño al oírle, no sé que reacción esperaba de mi más que quedarme mirándole el rostro. Las pocas lágrimas que tenía, salieron de mis ojos muy lentamente.

-¿Volveras?-.

-Me temo que no. – Hablo. Ella bajó su mirada como escondiendo algo.

-Joder..no, no puedes dejarme así nada más.-

Supliqué sintiendo el nudo en la garganta.

-Bill, por favor, ya saqué el pasaje.

– Pero cariño.. No puedes hacerme ésto!

Me arrodillé frente a ella suplicándole en cambio recibí un comentario de ella para nada agradable “te ves tan mal así”

Minutos más tarde ella caminó hasta la puerta, su aroma se impregnó en el aire. Me perdí en sus labios cuando dijo “se me hace tarde, Bill”

– ¿Quieres que te acompañé?.-

Ella caminó hasta fuera del sitio y la miré sin comprender.

-¡CARIÑO!-.

Ella no respondió , siguió su camino hasta alejarse completamente.

Sin perder más tiempo me subí al auto encendiéndolo, lo saqué cómo podía, aunque estuviera algo mareado.

Me detuve hasta donde ella andaba, sólo marche más despacio bajando los vidrios del lado del copiloto.

– ¿Quieres que vaya contigo?-.

Pregunté sintiendo cómo parte de mí decía que no era buena idea insistir.

Ella en cambio no me dirigió la palabra.

-ALISHA!-.

Grité llamandola. Ella se negaba a oírme pero la miré fijo. Su brazo estaba marcado..¿ Como si hubiese recibido un golpe ?¿quién era ella en realidad?

-¿Qué te pasó?-.

Automaticamente bajé del auto hablándole y tomándole del brazo. Se podía diferenciar claramente.

Ella me mira, esquiva la mirada. Le tomo del rostro fuertemente.

-Dime la verdad!-.

Le pregunto como obligándola a responder, pero ella me mira, sus ojos esconden lágrimas.

-Bill tengo prisa! Por favor déjame!-.

Me dice me esquiva la mirada otra vez.

-No hasta que me digas qué es esto.-

– Me caí, Bill! -.

-Puedo llevarte..-

Le hablo mirándola, siento cómo si estuviese molesta por algo en particular.

-No, Bill, no ! No quiero estar contigo!.-

Aquellas palabras fueron duras. Ella me dio su última mirada, se dió la vuelta me quedé viéndola como un imbécil.

Me encaminé hasta mi auto, en silencio, di un portazo y bufé. Vi cómo se alejaba cada vez más, en cambio ella dio la última palabra.

No puedo inhalar o exhalar porque el aire se desvanece, la vida es agridulce..nos estamos rindiendo automáticamente.

Minutos mas tarde…

He Conducido sin parar hasta dar con algún sitio parecido a una discoteca.

Respiré profundo. Comencé a tomar algunos tragos..ella seguía en mi mente todo el tiempo.

Caí en cuenta que alguien estaba delante de mí, quería pelear. Me alejé pero simplemente tropecé con otro sujeto bastante alto y de cuerpo robusto. No tenía ganas de pelear, pero me sentí obligado cuando justamente recibí un especie de empujón por la espalda…

                                  ***


No tardó mucho tiempo para que sucediera, maldije por haberme tomado aquella botella de cerveza con mi hermano, ya que me encontraba aún un tanto mareado.

Me puse en posición para darle un puño al que estaba delante mío, en cambio recibí otro empujón desde atrás lo que me produjo que el de delante me diera un golpe con su puño certero en mi mejilla. Sentí el impacto aquello había sido doloroso. Minutos más tarde, reaccioné, me le tiré ensima para tratar de responder al golpe con furia y con descontrol y comencé a forcejear, sentía cómo estaban todos alrededor de nosotros pero rápidamente siento que alguien me jala hacia atrás en el momento menos esperado.

Pude notar su presencia y su voz cercana a mi oído.

-Bill! Bill!Calmate! .-

Dijo en un tono de voz alto.

Al voltear, Tom me sostenía del brazo jalandome hacia fuera del sitio.

-Eres un idiota Bill. ¿Qué supones que hacías?.-

Me dijo en cambio sentí cómo después me abrazó posesivamente.

-Vamos, y me cuentas todo ¿si?

Dijo pero en cuanto habíamos llegado a su automóvil, lloré en los brazos de Tom mientras le contaba todo lo sucedido. Aquella chica se había ido de mi vida como por arte de magia. No le importó absolutamente nada. Sólo me preguntaba el porqué una y otra vez, sintiendo cómo cada vez me sentía poca cosa para ella.

Aún los pocos recuerdos que tengo de ella, su carisma su manera de ser, su manera de volverme loco con sólo mirarme, insinuarme.

Al día siguiente…

Comencé a escribir, sentado en mi escritorio del pequeño estudio, simplemente las palabras salian por sí solas una detras de otra en aquella hoja.

“Nada es más alto que el amor

así que susurrale a tu corazón

no te asustes de la oscuridad”

“Explotando los sonidos de la soledad

eco a través de la noche”

Rápidamente siento cómo que alguien está detrás de mí, en cuanto volteo veo que es Gustav.. Oh..joder se ha puesto mi traje el que había usado con anterioridad. Lucía plataformas y no le quedaba nada mal.

Estallé de la risa mirándolo sin perder ningún tipo de detalle.

Le saque un par de fotos, y las guardé.

Suspiro siento que debo darme una ducha para tratar de relajarme o kizas sólo dormir.

Semanas después…

Me encontraba en un sitio dónde mi hermano me obligó a entrar.

Estaba sólo y el ambiente era demaciado agradable.

Me senté en una de las sillas podía notar unas suave canción sonar. Las luces se habían encendido había una mujer vestida de prendas rojas. Ella comenzó a bailar, a contornear y mover su cadera además del esbelto cuerpo que tenía.

Las luces de neón colaboraban con la creación de un ambiente un tanto místico, seductor y quizás más prohibido de lo usual. Comenzaron a bailar algunas mujeres con sugerentes trajes. Comenzaron su show después se metieron entre el público queriendo captar la atención d éstos. Una silueta llamó mi atención.

Me sorprendo, ésta vez salían otro tipo de mujeres con vestimenta negra que estaban haciendo la coreografía acompañado la musica suave y sensual. Aquél cuerpo exitante y aquellos labios tan exquisitos me llaman la atención rápidamente. Comienza a dar un sugerente baile con sus caderas prominentes mi tentación es muy fuerte además de que me siento totalmente despechado. Están bailando con un sombrero tapandoles un poco su mirada, así que prácticamente le veo los hermosos y seductores labios. En cuanto bailan entre ellas y se frotan con descaro mirando al público, mi erección comenzó a crecer repentinamente. Bebí disimuladamente la bebida que me habían traído que estaba sobre la mesa. El número que hacían era totalmente sensual y exitante.

Minutos despues, una de ellas tira el sombrero al público de manera elegante.

Conozco ésa mirada..ese cuerpo tan sexie. Una oleada de sensaciones me recorre todo el cuerpo, me quedo totalmente helado con su sola presencia, con sólo verla. Pero..¿qué demonios? Me dije para sí totalmente sorprendido…

Caminé rápidamente hacia ella tomándola del brazo por impulso, sin importarme absolutamente nada lo que me decian, sin importar quién me mirase y me la llevé conmigo detrás del telón.

—Alisha! Joder! ¿Así que aquí trabajas?.-

Le dije enfadado mirándola fijamente  a los ojos mientras la tenía agarrada del brazo.

—Joder! Habla ya!.- La zamarreo sin cuidado mientras la miraba. Noto su mirada sé que no quería que lo supiera, era un secreto bien guardado que me tenía ocultado.

Los ojos se me llenaron de lágrimas. Ella asentó sin decir nada.

Besé sus labios repentinamente acariciándole los costados, sintiendo sus curvas mientras deslizaba mi mano por sus caderas las cuales tomé posesivamente…

                            ***

Estábamos de repente en el camerino donde golpeaban insoportablemente la puerta que yacía con llave. En ese momento acaricie sus curvas quizás con mayores ganas, y deseos que anteriores veces. Mis manos acariciaban su figura como si jamás la vería otra vez, mis dedos recorrieron la fina y delgada tela de sus bragas. Mis pantalones son abiertos por sus dedos expertos, sus manos me acarician la erección hasta que suelto gemidos placenteros. Nos entregamos una vez más, la tomo sin cuidado, sin prestar atención a los golpes de la puerta, mi mente se nubla , me colma de sensaciones únicas que ella misma provoca. Mis labios están acoplados a los suyos, estamos besándonos de una manera calurosa, donde el aire hace falta y la respiración se acelera, siento esa oleada de placer llenarme por completo cada centímetro de mi cuerpo. Pierdo el control una vez más, la tomo de las caderas moviendo mi pelvis con la mayor fuerza e intensidad, que oigo mi nombre salir de sus labios. Ambos soltamos jadeos y nos deshacemos entre gemidos. Esta vez me entrego al juego, la tomo tantas veces como fuertes hasta quedarnos exhaustos abrazados el uno al otro. Nuestras respiraciones están totalmente aceleradas así como nuestros latidos. No se qué paso allí afuera pero siento que ya no golpean la puerta, algo extraño siento que sucederá aunque no estoy muy seguro que eso suceda en este instante.

Suspiro asimilando las cosas, volviendo al pensamiento del trabajo que lleva Alisha. Esto no es normal, es decir una bailarina erótica, es decir que mierda. No podría aceptar el hecho que miles de hombres la observen como un objeto, el pensar el cómo babean por ella, jamás pensé que todo esto acontecería. Dándole vueltas al asunto, todo concuerda ” Trabajo, Starbucks, café, una noche bajo el cielo de estrellas” Pase incontables noches a su lado, compartiendo, viviendo el segundo.

-BILL!! BILL!!! ¿Me escuchas?-

Me saca de mis pensamientos aquella suave y seductora voz, me estremezco al oírla no sé porque siento que esto no podría funcionar en un futuro. Ella parece algo alterada cuando me mira de esa manera, noto miedo en esos ojos.

-Tienes que irte de aquí, Bill! Por favor vete!-

Exige mirándome fijamente, no sé si son lagrimas por algo verdadero, o quizás lagrimas de desesperación y miedo. Veo su rostro acariciando su mejilla con suavidad, esto es lo que no esperaba que pasara, me rehúso a vivir así, así que fingidamente le sonrío, sé que esto no sienta bien que todo se irá al demonio otra vez, aunque el que lo intentara voy a hacer yo, no ella.

Ella me mira con esa fuerte intensidad que tienen sus ojos, me transmiten ese amor incontrolable que tanto detesto en estos momentos, de repente siento que no podría abandonarla, no quiero dejarla, no quiero ser, ni soy capaz a terminar esto.

Suspiro mirándola a los ojos, siento que esto me llevara a la perdición, con esos labios carmín que me provocan besarlos, sin miedo de volver a caer en el amor.

Entrelazo nuestras manos, se que jamás encontrare a una chica similar y con estas características, ella me hace sentir como que vuelo. El aprecio se ha incrementado un poco mas desde que supe la verdadera razón por la que me había dejado. Aquella noticia me era poco agradable, ella no era cualquier chica, su trabajo me hacia cuestionar que hacer, porque, de repente tenia tales pensamientos como sacarla de este lugar, no me era posible asimilar las consecuencias, no podría soportar el hecho que bailase frente a toda clase de hombres e insinuarles cosas prohibidas con aquellos bailes sensuales. Odio esto en este instante. Golpeo el puño en la pared, ella se sorprende repentinamente y se aleja de mi ,se vuelve a colocar sus prendas nuevamente. Un frio helado me recorre lentamente mi cuerpo, siento que esto no está bien, pienso que esto es una locura. Tiro de mi cabello en señal de desespero, debería irme, pero creo que volveré a buscarle, no soy capaz de dejar las cosas como están, ni dejarle en esta mierda de sitio. Sé que habrá una solución, que esto no es una tontería ni un simple capricho. Suspiro hondo y la veo, esta arreglándose el cabello, nunca la he visto tan seria como está ahora.

Aun sé que hay algo mas detrás de esa mirada misteriosa, sé que hay mas detrás de este sitio que me da escalofríos el solo pensar que ella esta, y permanece aquí.

-Vete B-Bill- Vete!-

Me exige nuevamente mientras la observo con la mirada, su ardiente cuerpo me hace perderme en el deseo. Me acerco hasta ella, acaricio su mejilla con delicadeza mientras la miraba con algo más de picardía.

– Bill, vamos, tienes que irte. Ven, conozco una salida-

Me dice, automáticamente me lleva con ella de la mano, me jala hacia un pasillo algo oscuro donde luces tenues alumbran apenas el sitio. Pero no quiero dejarla, no aquí, en este lugar donde abundan hombres queriendo poseerla, queriendo ese cuerpo tan sensual, tan tentador.

Me está llevando hacia la salida, mis manos se juntan con las de ella, me promete que saldrá de este lugar, pero no le creo, se que estará aquí y eso es algo difícil de ignorar.

Me sentí atacado con un fuerte sentimiento, tal vez de odio o celos, sin dudas todo esto me estaba afectando de gran manera y no era una un capricho. Suspiro hondo pensando sobre todo, poniéndome en su lugar definitivamente. Si el problema era el dinero podría solucionarlo, a menos que lo haga por solo puto placer.

Maldije entre mis pensamientos, alejándome de ese sitio, tan solo me da escalofríos el pensar sobre el tema.

Siento que mi corazón es una jungla, sé que no podría decirle adiós, tal vez estoy en el sitio de alguien pero no importa porque sé que estaré bien.

                               ***

Despierto por causa de la alarma, hoy tenía que ir al mercado junto con los chicos.

Luego de una rápida ducha, me visto casual mientras que después iba por el desayuno. Ésta vez los chicos andaban en lo suyo mientras que yo estaba pensando en alguna alternativa sobre Alysha. Finalmente había decidido perdonarla, darle otra oportunidad, aceptar su trabajo de todas formas, debía confiar en ella de una vez por todas .

Tomé el café y recibí una llamada importante sobre Tokio Hotel. Todo estaba normal, en la página oficial había hecho un tipo de publicación sobre el nuevo Album, que pronto estaría listo y sería el regalo perfecto para ésta navidad, sin lugar dudas.

Han pasado pocos días desde que vi a Alysha. Simplemente me había ido a una cafetería, como era de costumbre la habia encontrado allí.

Hablábamos sobre lo nuestro, sobre lo que pensaba ambos mantuvimos una charla interesante. Ella tenía una sonrisa hermosa, sus ojos brillantes me miraban fijamente a los míos. Su maquillaje suave adornaba su rostro, esas finas líneas de delineador negro decorando sus ojos, su hermosa piel blanca y su cabello cercano al escote, pero principalmente me tentaban de sobremanera aquellos labios seductores.

Nos despedimos, ambos no teníamos tiempo pero simplemente la besé mientras que mis sentidos se perdían otra vez. Quiero tenerla para mí, no quiero compartirla con su trabajo. Ella insiste que sólo baila, no es como las demás, que hacía poco tiempo había ingresado ahí, como desde ése dia en que nos conocimos bajo el cielo de diamantes. Sus labios son tersos y suaves, cálidos y no quiero pero debo despedirme de ella ahora. Miro el reloj, hoy tendría una entrevista y debía ser lo más puntual, sobre todo, no olvidar ciertas respuestas.

————–

Horas más tarde..

El día había transcurrido con normalidad, aún estábamos de novios con Alysha y éso simplemente me tenía más que feliz.

Así que hemos conducido en mi auto, ella me dice que le gusta viajar, que quisiera salir conmigo en algún tour.

Me sorprendo por sus palabras eso significa mucho para mí, el que ella esté conmigo en las giras supongo que me sentiría feliz, ya que no la extrañaría tanto. Mi mente funciona rápido, siento que planeo demasiado con ella al lado, que siento que me vuelve loco.

Estamos ahora los dos solos, mirando el agua de la playa, las olas moverse. Ella se acomoda , se sienta sobre mis piernas riendo por lo bajo, me besa acariciando mi cuello con suavidad, siento su experta lengua recorrer mi cavidad más lentamente, con esa intensidad que me hace sentir que estoy en las nubes.

No me dice nada y acciona un botón el cual sólo logra que el asiento se incline más hacia atrás.

Sus manos me acarician la piel expuesta, me quita la playera rápidamente, y después ella quita la suya dejando al descubierto su sostén.

Me besa en los labios me impide mirar y junta sus manos con las mías, las lleva hacia atrás de su espalda pidiendo que con éstos gestos lo desprenda. Hago lo que me dice y sus senos tocan mi pecho al descubierto. Ella logra que mis manos acaricien su espalda con delicadeza.

Recuerda el sol

siente ese calor y como todo ha empezado.

Siento que nos estamos rindiendo automáticamente ante esto.

Me acaricia, ésta vez sus manos pasean por mi espalda y las mías bajan hacia sus bragas, lentamente ella marca un leve roce entre nuestros cuerpos. Aquello sólo logra que la tome de la cadera , que la apriete más a mí. No sé como pero rápidamente estoy dejándome llevar con sus besos en la longitud de mi cuello. Sus caricias son tan suaves como el terciopelo, sus labios mi tentación, la más grande. Mis manos se cierran en torno a sus senos, ella emite un suave sonido de un jadeo por lo que hacía. En respuesta, sus caderas se comienzan a mover rozándo mi parte baja completamente..

                                ***

Habíamos pasado un buen momento juntos en mi automóvil, la cercanía de nuestros cuerpos era lo que nos mantenía unidos. El sentir sus latidos junto a los mios, ése aroma delicioso a flores que me brindaba su piel, su pelo, sentir que me he enamorado por completo, como nunca antes. Éste sentimiento de quererla y apreciarla vuelve como un huracán, ella desordena mi corazón, ella es todo lo que una vez deseaba, lo que alguna vez ansiaba tener.

Si no la hubiese conocido, sería el mismo aburrido vocalista pero sin la magia que te hace conducir hacia la cima, porque siento que el amor es nuestra gasolina que nos hace sentir completos para vivir con alegría y siento que ella y yo estamos viviendo éste sueño que supongo o quiero creer que no tiene final.

La llevo de regreso hacia donde vivía, no me permitió acercarme demasiado así que la dejé en una cierta distancia del edificio donde me indicaba.

Yo siento que confio en ella más que a nada, confio en lo que dice, siento que todo ésto es algo mágico.

Nos besamos antes de despedirnos, aquél fue como el primer beso, tan intrigante, tan dulce y apasionado. Aquellos labios suaves se movían en contra de los míos con demasiada delicadeza, sedosos, expertos y sin profundizar demasiado. Luego me doy cuenta que ella se aleja, saluda con su mano derecha, me envía un beso en el aire. Le sonrío de regreso, ésos labios provocan mi tentación más grande, son mi mayor deseo. Comienza su modelaje alejándose de mí, no pierdo cada detalle de sus hermosas curvas que me tienen perdido, siento que no me oculta nada, siento que ella es sólo mía y sé que el amor que nos tenemos es más grande que el océano, no puedo estar más feliz de tenerla.

Enciendo el auto, mi rostro de tristeza se presenta mientras la veo caminar en el espejo retrovisor. Sé que no puedo cambiar ésto, necesito concentrarme más en mi trabajo ya que la disquera nos han estado molestando sobre la fecha de nuestro álbum. No hemos estado mucho tiempo en el estudio, sólo supimos entrar y prácticamente tratar de inventar alguna clase de sonido que no resulte tan pesado.

Me dirijo hasta mi casa, hoy ha sido un día increíble, si es con ella al lado siempre lo es, siempre lo sería.

Suspiro con el pensamiento en el álbum, hoy trataré de escribir algo ya que justamente se acercan los meses  dónde ya tendríamos que tener todo listo.

-Holaaa!-

Saludo con ánimos  cuando entro a la casa, pero noto que no hay nadie y supongo que estarán en el patio trasero o en algún sitio.

-¡Bill!-

Miro hacia la voz que salía de un pasillo. Aquél chico me sorprende, siento que se han ido todos.

– Andreas! ¿A dónde están todos?-

Le pregunto, desde ya que no parecía saber nada.

-Tom se ha ido a pasear su mascota, los Gs a una tienda, no tardarán-

-Bien, ¿Te han dejado sólo?.

Le pregunto mientras lo miraba, sentía que estábamos sólos.

-No, estaba en la habitación, viendo una película.

Me dice, noto su voz, él está cansado, y creó que necesita una siesta.

-¿Quieres tomar algo?-

Le pregunto mientras vamos a la cocina por algo de café.

– Vamos. Así que ¿Alisha? –

Me codeó. Nombro a la mujer con quien estoy, espero que no diga nada, ya que no quisiera oír tonterías.

– Si me encanta, es la mujer más perfecta que jamás pude tener..-

Le digo, siento la ilusión dentro de mí, de que hay algo fuerte cada vez que nos encontramos, cada vez que la pienso..y digo su nombre.

– Hermano, a mi no me gusta ésa mujer para ti, es.. No me convence.-

Dice y aquello pareciese una copa romperse en el suelo, haciendose pedazos en el frío piso.

-Andreas, ella es perfecta, pronto estará con nosotros, la conocerás, verás que es hermosa.-

Le repito, sé que no debería dudar, llevamos mucho tiempo saliendo.

-Hermano, sé que ella te gusta, pero es normal y la quieres, pero ten cuidado Bill.-

Me dice como si fuera una amenaza, aquello sólo logra que le repita lo que me pasa.

-Andi.. Yo confio en ella, en todo lo que dice. No me hagas dudar de su amor.-

Le repito, mientras nuestros ojos se encuentran, después me desvía la vista.

-Esta bien, Bill, sólo es una advertencia.-

Habló como si aquello me frenara.

…..

Los días pasaban, todo iba perfecto, tanto con la banda como también en mi vida amorosa. Se acercaba la navidad la fecha especial.

Pero no todo era color de rosa. La disquera nos estaba presionando con el album y debíamos prestarle más atención a nuestro trabajo como músicos.

Ya tenía ocho canciones, por lo visto eran las mejores que había creado pensando en ella.

Una de ellas se trataba sobre amar a quién te ame de vuelta. Fue la primer canción, cuando la conocí.

Otra se trataba de Sentirlo todo. Aquello se trababa de nuestros encuentros, lo mucho que me encantaba tenerla conmigo, despertar a su lado, ser su hombre, el único de su vida.

Las demás no les veía el sentido ya que eran frases sobre la banda, sobre nuestro trabajo, salidas frecuentes a fiestas y entre otras.

                            ***

Los días siguientes habíamos estado trabajando duro en el estudio, era una promesa que se mantenía en pie.

Ya era fin de semana y teníamos una cita Alisha y yo. Se trataba de una cena romántica, una especial. Hoy la vería en un restaurante de lujo, después de una semana entera sin estar a su lado.

Tom me alcanzó hasta el sitio, en auto, más que nada tenía que estar antes que ella llegara. La esperé, elegi una mesa con vista a una ventana. Estos sitios me encantaban porque eran sitios verdaderamente tranquilos, y la vista era de lo mejor.

Un par de minutos más y ella estaba en la puerta, estaba tan elegante que deseaba levantarme para tomarle de la mano y llevarla hasta la mesa. Vestía una falda corta, un maquillaje único especial que lograba que se viera hermosa y diferente. Su cabello estaba elegante y lucía muy hermosa con ésa blusa que llevaba.

Se sentó en frente mío, cenamos tranquilos hasta terminar nuestros platos.

Noté que en ése momento había algo diferente en su rostro, la picardía se notaba a simple vista. Ella jugaba con una de sus manos bajo la mesa, y me estaba acariciando con una de sus piernas la parte prohibida.

Me gustaba la manera que tenía de quererme, era simple, juguetona.

Me encaminé hasta el baño, ella discretamente me siguió. Me tomó de la mano pidiendo que entrara con ella en el baño de mujeres. No había nadie así que caminé con ella y me llevó a un cubículo, donde ahí mismo me acorraló para besarme. Me dijo que no haga ruido, me lo dijo en el oído y después lamió mi oreja, con ganas. Cerró sus manos en el pantalón.

Me desprendió el mismo a tirones, lo bajó y ella bajó su mini mientras se apoyaba contra mi cuerpo. Abrió su blusa, sus pezones estaban completamente duros, así que aproveché para lamerlos y meterme uno de sus senos a mi cálida boca y ella se mordía el labio para no hacer ruido. Una de mis manos bajaron, acariciaron su sexo sin pensarlo más de dos veces, estaba muy húmeda para mí. Me coloque el condón con dificultad y la tomé de las caderas, la pegué a mi cuerpo cuando hábilmente ella se subió  mi cadera además de ayudarla con mis manos en sus glúteos para subirla, ella rodeó mi cintura con sus piernas.  La penetré con cuidado, comencé a mover mi cuerpo  contra el suyo, proporcionandole embestidas suaves y continuas. Ella besó mi boca enredó mi lengua con la de ella, mientras mi cuerpo pedía más profundidad. Ella tiene sus brazos alrededor de mis hombros, se ayuda, se mueve deliciosamente mientras la penetro más profundo, todo lo que puedo. Trato de aumentar los movimientos, de poder llegar al punto máximo pero se me olvida que estamos en  un baño y esto lo prolonga por más tiempo. Quiero llenarla de mí, quiero que llegue a su punto, ése de placer donde oigo sus gemidos provocados por mí.

Mi respiración se contiene, alguien ha entrado, y me detengo. No sé que es mejor, si terminar con mis propias manos y haciendo el labor yo mismo o salir  los dos a otro sitio, para así acabar con esto.

El calor de su interior me aprisiona y no puedo más con todo lo que acontece. Oigo a quién sea que haya venido, se va marchando y eso concluye en que debería hacer algo al respecto. Así que empujo brutalmente en su interior en constancia sabiendo que es la única manera de terminar ésta agonía que logra que mis gemidos queden atrapados en mi garganta. Ambos quedamos exaustos, abrazados, dándonos besos suaves.

Cuando culminamos, subimos nuestra ropa, la acomodamos, y salimos de allí calmando la respiración agitada, mirando el ambiente sin que nadie lo notara.

Me ha encantado verla en el día de hoy, siento que esto es un comienzo, que no tiene final.

……

Cuando llego a casa, me reciben los chicos, me preguntan como ha ido todo, le respondo que bien. Georg me guiña y sé que algo han estado hablando mientras no estaba.

“Vaya descanso de fin de semana”, me digo para mí mismo, encaminándome hasta el baño. Me quito el traje que tenía puesto, dejándolo doblado, para luego meterme así a la ducha. Hoy fue un fantástico día y me alegra saber que todo está más que bien entre ella y yo, a pesar de la distancia.

                                               ***

Mi rutina se estaba convirtiendo en algo de no creer, influía mucho en la relación que tenía con Alisha.  A ella la veía cada vez con menos frecuencia por lo que hoy era fin de semana y tenía un plan. Marco un número, llamo reservando un hotel, en el que nos reencontraríamos y además de eso,  ésta noche tenía planeado dormir junto a ella.

Finalmente nos habíamos encontrado en el hotel, ésta vez podía distinguir otra fragancia diferente en el ambiente.  Ella había cambiado su perfume por otro más exquisito.

Hablamos sobre lo nuestro, ahora que está aquí conmigo no pierdo un minuto más y me acerco hacia ella, la beso lentamente dándole la  profundidad ansiada donde nuestras lenguas se acarician ansiosas. Ahora mis besos son cortos sobre sus labios, y se dirigen hasta llegar a la longitud de su cuello. Le recorro el mismo a besos suaves, ligeras succiones le acompañan. Supongo que ella no se imagina lo todo lo que siento cada vez que la veo, cada vez que la tengo a mi lado. Un suspiro sale de entre mis labios, puedo ver lo hermosa que se ve hoy.

Pasados algunos minutos ya no podía controlar las ganas que ella provocaba en mí. Una champaña está abierta mientras nosotros acaparamos nuestros cuerpos cerca de la mesa entre caricias y besos compartidos. Algo extraño pasa con ella pero no me importa, no quisiera desperdiciar éste momento interrumpiendo nuestro encuentro con tontas preguntas.

Nuestros labios se unen en un beso suave con movimientos ligeros que me encienden en su totalidad hasta que de a poco noto que los besos se vuelven más apasionados. Mi cuerpo reacciona al suyo pero ella me toma de la cadera presionándome contra ella, aquello logra hacer que emita un gemido entre sus labios. Frota su cuerpo contra el mío y me estoy exitando con sólo sus suaves y salvajes movimientos de su cuerpo y de sus manos contra mi espalda. Me provoca y nos quitamos nuestras prendas. Ella me toma mi dureza entre sus manos y yo simplemente me deshago en gemidos, ya no puedo más. Me provoca nuevamente, esta vez esta jugando sucio y las uñas de sus dedos me rasguñan mi espalda en su longitud. Un jadeo sale de mis labios, ella se da la vuelta roza su trasero contra mi dureza, sigue jugando con fuego, me está tentando a que la haga mía nuevamente. No resisto más, mis dos manos van hacia la cadera de ella y la penetro bien adentro, bien profundo, todo el calor que emana su femineidad me colma completamente y mis movimientos se tornan bruscos salvajes. Aquello logra que suelte jadeos bajos por el placer proporcionado, igual que Alisha, está disfrutandolo. Mi cuerpo permanece sobre el filo de la mesa recostado ligeramente, sus piernas se abren, los  movimientos son suaves. Ágilmente ella se separa de mí, me enfrenta con un beso dulce y una mordida  suave en mi mentón. Me empuja suavemente hacia atrás, me hace posar completamente mi espalda sobre la mesa y termino recostado en la misma apreciando la vista desde abajo. Me toma, ahora mismo ella me domina, se mueve frenéticamente sobre mí, aquello logra sólo que suelte gritos placenteros, altos, mientras la mesa se movía un poco.

Sus caderas se mueven con insistencia, con brutalidad de arriba hacia abajo, me llevas a la cima. Tira  de mis aretes de las tetillas, y se mueve tan  rápido sobre mí, que aquello me provoca gemir como nunca antes, a causa de los placenteros movimientos de Alisha.

….

A la mañana siguiente, bebemos café tranquilamente, pero hay algo en ella que me tiene intranquilo. La noto distante la noto  rara .

Ésta vez tenía que alistar todo para el lunes, ya que se ponían insistentes con lo del Álbum, y ya no lograba tener un fin de semana tranquilo.

Debía irme ya mismo, tenía varios asuntos que atender. Ésta vez no  podía estar con Alisha, así que igualmente no podía cancelar mis citas.

Sé que no había podido darle la atención suficiente con todo el trabajo  que tenia pero al menos toda ausencia traía su recompensa.

Al caer la noche la invité a un lujoso restaurante donde cenamos, pero parecía pensativa, rara, distante de mi. Otra vez no sé que demonios le sucedía.

Insistía en no tener ganas de comer, que estaba bien, mientras revisaba su teléfono. Me estaba causando rareza su fría actitud.

……..

La semanas volaban. Otra vez, que llegaba a casa sin tiempo para verla, sólo tenia tiempo para dormir unas pocas horas. Nos habíamos distanciado por más de dos semanas, ésta vez mi trabajo me impedía verla como era costumbre, aunque hoy era un día normal como cualquier otro.

Una misteriosa llamada me alerta de que debo atender cuanto antes, tenía demasiados planes en mi cabeza y suponía que era una llamada demasiado importante, por la insistencia de la misma.

Atiendo al teléfono y siento como cada palabra me mata.

Dices que te casarás mañana, que te olvide. Aquellas palabras me llegan de una manera inesperada, me rompen completamente. Mis lágrimas no tardan en salir con lo que decías.

No comprendo absolutamente nada, todo esto me toma por sorpresa.

Hacia tiempo que no hablábamos,  aquello me produce pensar que tal vez si es un sueño, si estamos o no en el teléfono, porque cada palabra me esta matando. Pienso que eres una chica sucia, que estás jugando sucio  pero a la vez eres guapa, me dominaste a tu antojo.

Tuviste mi corazón ése día cuando las estrellas estuvieron y fueron presentes de aquél primer beso,  tuviste la noche que pasamos juntos, todas ellas donde te entregué hasta mi alma con cada beso, cada caricia. Todo mi amor, que ahora quedará atras. Me muero con cada latido.. cada letra, cada mentira que me decías.

Solo amigos, dices pero estoy en el sitio de otro y no hay nada que curar, no hay nada que pueda hacer más que dejarte ir.

Me derrumbo, no puedo creerlo, no puedo creer el cómo he caído en tú sucio juego.

                                 ***

Saco una hoja en blanco, sentándome en el escritorio comienzo a escribir frases sin sentido, de quizá unas de las posibles canciones para el nuevo disco, aunque mientras lo hago, mi mente esté ocupada en pensamientos sobre la situación.

Siento que éste es un gran día para decirte adiós para siempre, Justamente en ése preciso momento en que te empezaba a adorar, me habías mentido. Mi corazón está abierto en estos instantes y las palabras en el papel son demasiadas claras como para que puedan creer todos que sólo soy un humano, que éstas cosas también me suceden, no soy sólo Bill, el famoso, el adinerado, el vocalista de una famosa banda Alemana, que soy más que éso.

Mis ojos están hinchados por lo que es demasiado difícil poder ver mientras mis lágrimas manchan mis mejillas. Mi cabeza está en las nubes, no puedo pensar en nada más que sólo centrarme en vaciar todos mis sentimientos en una hoja de papel, que pronto estaré junto a la misma, cantándola en los escenarios, a la vez recordándote.

Todo tiene un costo y el mío fue confiarme demasiado en ella, ahora sólo me quedan cigarrillos para respirar y poder tranquilizarme por completo de alguna manera, relajarme hasta lograr estar en calma.

Sé que sol seguirá nuestro camino, todas las cosas seguirán su rumbo, que te casarás, tendrás hijos y sólo puedo decir que tengo que conformarme con lo que me tocó, con lo que queda enfrentarme cada día. Aquéllos recuerdos de lo que alguna vez fuimos, esos besos cálidos, ésos labios rojo carmín, que más de una vez me robó el corazón.

Me pregunto si ésta separación, todo ésto que acontece , si puedes sentirlo.

Todas las sombras de lo que fuimos desaparecieron para siempre. Siento que

nosotros no pertenecemos a nadie, que fuimos mucho, que podríamos haber sido mucho más. Pero cada vez que pienso en nosotros y todo lo que somos se viene abajo, nada es para siempre aunque le de mil vueltas. Tú no eras de nadie.

Hoy es un gran día para decir adiós, adiós a todos ésos lindos momentos que tuvimos, adiós a todo éste sentimiento que me aprisiona.

Sé que voy a estar bien, sé que todo se cura con el tiempo, aunque cueste, sé que lo lograré.

También sé que estoy en el lugar de otro pero no importa, ya no me debe importar. Las lágrimas siguen cayendo y es imposible continuar con la escritura. Solamente espero que tomes todos los recuerdos de nosotros y lo eches a volar en un cohete hacia el cielo porque yo no los quiero. Sé que estaré mejor, que cada vez que piense en nosotros, dejes ése cohete volar lejos .Aún recuerdo los días que estaban destinados a durar para siempre.

Todo lo que viene ahora por delante de nosotros, será para siempre.

…………….

Me desperté aunque no tenia ganas de hacer nada, sólo llamé a la disquera avisándoles que no estaba en condiciones para continuar con el Álbum. Entre discusiones lo pude convencer, con los chicos habíamos hablado en ésos cortos días y todo lo que conllevaba poder retrasar todo, ellos estaban conforme. Se habían ido de viaje, no perderían la oportunidad, mientras que yo y mi hermano viajaríamos a Las Vegas. Él creyó que era necesario descansar de la rutina y de la ruptura con Alisha, era buena idea pero suplicaba que me acompañara aunque no esté todo el tiempo conmigo, ya que podría cometer alguna locura en la cuidad del pecado.

Días mas tarde..

Los bolsos estaban listos, mis anteojos perfectamente impecables, sin rastros de lágrimas. Di un suspiro y nos subimos al avión directo a Las Vegas. Dormí en todo el viaje, pero mi hermano se mantenía a mi lado. Sé que a él le ha afectado, sé cuando me mira, cuando nos conectamos, parte de lo que siento él también lo siente, es algo extraño todo esto, ya que nadie lo entendería.

Llegamos en unas buenas horas, comencé a llevar las maletas junto a Tom mientras que miraba las calles del mapa. No era la primera vez que habíamos venido, sino una de tantas.

Mi vista se centró en el nuevo hotel, que al entrar al mismo nos acompañó un hombre de edad a llevar las maletas hasta la habitacion donde estaríamos. Algo extraño hay en ésa chica que estaba caminando delante de nosotros, algo extraño que me hace volver a recordar a Alisha nuevamente. Mis lágrimas caen y no puedo evitar contenerme, los anteojos se empañan mientras caminaba dentro de la habitación.

-¿Estas bien?

Me pregunta mi hermano mientras mis lágrimas caen sin parar, siento que necesito tiempo a solas para poder olvidarme completamente de ella.

-V-vamos al bar-

Le digo rápidamente entre cortado, fue lo único que salió de mis labios, era un momento de ésos dónde quieres ahogarte con alcohol, en el que necesitas olvidar. Me dirijo hasta el baño y me enjuago el rostro. Sé que es difícil disimular con sólo maquillaje, ésas ojeras y los ojos hinchados que tengo en éstos momentos, sé que no puedo ocultarlo hacia los demás. Todo fue tan repentino. Todo fué como un sueño, en el que despiertas y nada es como debería ser.

                                      ***

Una vida perfecta ha empezado para mí, éso es lo que siento al llegar al sitio. Estoy en la cima desde que te fuiste, sé que nada está hecho para durar y que ésta vez debo olvidarme de ti, de tus maneras de amarme, de tus mentiras, de tu belleza absoluta que invade mi mente cada vez que veo hacia la multitud y veo tu rostro. Debo dejar todo los sentimientos de lado y disfrutar lo que resta de mi vida, me siento enfermo sin su boca, sin su mirada, sin el calor de su cuerpo que me hace falta cada día de mi vida.

Tuviste la noche y todo mi amor ahora debo dejado atrás, es por mi bien o así lo diría mi hermano.

Siento que un día nuevo esta llegando, que somos jóvenes, y tenemos que tener los ojos abiertos por el lugar donde estamos, porque todo puede suceder. Pero a la vez me pregunto porque me preocupo tanto, si vinimos a divertirnos y a olvidarnos de todo. Estoy cegado por cada copa que bebo, siento que me hundo en el paraíso, siento ésa felicidad que busco cada día de mi existencia, me siento bien y todo esta bien. Con las luces de la ciudad del pecado y con las mujeres que están bailando, siento que me pierdo con cada copa. Siento que somos los reyes del suburbio en éstos momentos, que también tenemos que sentirlo todo para sentirnos vivos, y no mirar hacia atrás.



« Presente.»

Ése día en que la perdí, todo mi mundo se derrumbó completamente. Fué en ese momento que mi vida dió un giro inesperado, cuando ella me abandonó sentí como cada parte de mí moría lentamente, solía tener un vacío inexplicable, porque la necesitaba.

Fué entonces cuando todo tenía sentido para mi después de ésas vacaciones soñadas en Las Vegas…el recuerdo de ella todavía lo tengo tatuado en la piel y no puedo creer que se casara con otro después de todo lo que habíamos vivimos juntos, todas ésas incontables noches de pasión que fuimos preso de la locura, pero ahora mi cama está vacía.

Me pregunto a qué sabe tu cuerpo en el sitio de otro, si es que él te dará lo que yo no te he dado. Caigo a través del destino, las lágrimas vuelven a salir, pero antes que nada siempre debemos levantarnos y alzarnos de nuevo, según diría mi hermano. Me pregunto cómo es que cerraste la puerta, sabiendo que nadie podía amarte más que yo. No puedo inhalar y exhalar porque el aire que tengo se desvanece, me estoy afixiando con cada sentimiento muerto dentro de mí. Cuando te olvidaste de nosotros destrozaste el resto de amor en mí, y siento que fuera del amor ya nada lo va a poder curar. Me hiciste pedazos como un cristal roto.

Entrecierro los ojos acomodándome en la cama, mi hermano esta al lado mío, acompañándome unos minutos.

Mi corazón está dañado simplemente no encuentro las razones suficientes, jugaste sucio y eres una perra mentirosa, me dominaste a tu antojo con cada noche de placer. Déjame superarte una y otra vez, déjame ser libre de una vez.

El silencio es mas alto que antes.. Se terminó pero yo siempre viviré en el pasado y en todo lo que tuvimos, siento que te necesito, pero a la vez me doy cuenta que yo siempre estaré invadido por ti por más que piense en positivo, siempre hay algo tuyo clavado en mi alma.

No sabes lo que es la vida hasta que mueres por ella, mueres con cada desilusión, con cada recuerdo.

No puedo evitarlo y las lágrimas caen pero me siento sacudido hasta que oígo mi nombre.

Todo se esfuma rápidamente.

Oigo esa voz, y siento como mi cuerpo se mueve a los lados nuevamente. Abro los ojos cuando encuentro mi mirada con la suya.

-Bill despierta.. despierta!

Me sonríe al verme, seca una de mis lágrimas con su pulgar.

-Estabas teniendo una pesadilla..-

Dice pero mi rostro está húmedo por las lágrimas.

-Lo siento..-

Susurro. Ahora estoy entre sus brazos, me siento rodeado por él, y mi rostro se apoya sobre el hombro. No puedo evitarlo, no puedo evitar tener pesadillas, todo me lo recuerda. Siento que la vida es corta y que debo amar a quién me ame de vuelta, aprovechar la oportunidad porque la vida es una sola y hay que vivirla de la mejor manera posible.

Fin.


NOTAS FINALES:

Muchas gracias por leer, ésta es mi segunda Fic, espero que les hayan gustado, comenten lo que quieran. Katnistz.

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